El caso Sterling está lejos de terminarse. De hecho estamos en los comienzos de lo que podría ser una batalla legal de años de duración.
Desde que se conoció la suspensión de por vida de la NBA a Donald Sterling, su esposa Shelly Sterling se trató de posicionarse en línea con la NBA aceptando las decisiones de Adam Silver pero a la vez dejando claro que era de su interés mantener la propiedad de Los Angeles Clippers.
Las intenciones de Shelly Sterling se han ido escuchando en tantos lugares que ayer domingo la NBA se vio obligada a emitir un comunicado aclarando aún más si cabe su postura: no quiere a ningún Sterling al frente de los Clippers.
EL COMUNICADO DE LA NBA
«Bajo la Constitución de la NBA, si el control de un propietario es terminado por una votación de las tres cuartas partes, el resto de copropietarios del equipo también deben renunciar a su interés», declaró a través de un comunicado Mike Bass, portavoz de la NBA. «No importa que el resto de propietarios estén relacionados como es este caso. Éstas son las reglas a las que todos los propietarios de la NBA se adhieren como condición para tener la propiedad de un equipo».
SHELLY NO TARDÓ EN RESPONDER
Al poco de conocerse el comunicado de la NBA, llegó la respuesta por parte de Pierce O’Donnell, abogado de Shelly Sterling.
«No estamos de acuerdo con la interpretación interesada de la constitución por parte de la liga, su aplicación a Shelly Sterling o su validez en estas circunstancias únicas. Vivimos en una nación de leyes. La ley de California y la constitución de Estados Unidos están por encima de esa interpretación».