Problemas y serios en Houston. Más allá de ir 2-1 por detrás en las Finales del Oeste, los Rockets sufrieron en sus carnes todo el potencial de los Warriors, que les destrozaron por 41 puntos de diferencia en el Game 3 y que, para más preocupación de los texanos, añadieron definitivamente a sus puntales anotadores a Stephen Curry, 35 tantos anoche.
La mayor parte de esa producción de Curry llegó en la segunda mitad, concretamente en un tercer cuarto donde Golden State doblegó por 34-24 a Houston y donde Curry firmó 18 tantos, para 26 en el global del segundo tiempo.
Harden: “Salimos muy lentos”
James Harden, quien sufrió en sus carnes los rigores ofensivos de Curry, que lo buscaba repetidamente para explotar el lado débil de la defensa de Houston, tenía la explicación a lo sucedido. “Salimos muy lentos, muy lentos, muy blandos. Ofensivamente no teníamos confianza”, apuntó La Barba en la rueda de prensa posterior. Y de todo ello se aprovechó Curry, aunque nada se redujo exclusivamente a esa vuelta de los vestuarios.
Antes, los Rockets ya habían demostrado flaqueza, con un primer cuarto demasiado malo atrás. “Por la razón que sea, especialmente en el primer cuarto (31), les concedimos demasiados puntos”.
Harden fue castigado por Curry, quien desbordó en ataque al de los Rockets. Luego, ofensivamente, La Barba fue el mejor de Houston, con 20 puntos, a todas luces insuficientes en una noche colectiva para olvidar por parte de los texanos.
Las 20 unidades de Harden estuvieron acompañadas de 5 rebotes, 9 asistencias, 1 robo y 1 tapón en 32 minutos. El candidato a MVP de la Temporada Regular cosechó además 4 pérdidas y dejó una hoja de tiro de 7/16 en lanzamientos de campo y 2/6 en triples. Precisamente aquí, desde esta distancia que tanto rédito le ha dado al juego de Houston, los de Mike D’Antoni firmaron un 11/34, un 32,4 por ciento de acierto en triples, con malos trabajos de Chris Paul o Eric Gordon, ambos en 2/8.