El 1 de mayo, Stephen Curry batió un récord histórico al convertirse en el primer jugador en la historia en anotar 50 puntos en un Game 7. Dos semanas después, dicho hito ha quedado desbancado.
Jayson Tatum se ha encargado de convertirse en el nuevo recordman de los séptimos partidos al alcanzar los 51 para liderar a Boston a unas nuevas Finales del Este, las segundas consecutivas y las terceras en cuatro años. Los Celtics no solo se llevaron el duelo, sino que lo hicieron de forma clara y convirtiendo el TD Garden en una fiesta al imponerse por 112-88, haciendo patente la superioridad que muchos intuían sobre el papel pero que no habían sido capaces de plasmar sobre la pista a lo largo de la serie.
Siendo justos, así como los Warriors necesitaron todos y cada uno de los 50 puntos de Curry para derrotar a los Kings, Boston podría haber vivido con un Tatum menos exuberante. La superioridad tras el descanso fue tan abrumadora que sus últimas canastas se sintieron casi como ensañamiento, pues el parcial del 33-10 en el tercer cuarto había dejado todo más que sentenciado y verle superar a Steph era ya casi el único aliciente. De hecho, los 10 tantos que unos inoperantes 76ers anotaron en dicho tercer parcial establecieron otro récord al convertirse en la peor anotación en un cuarto de un partido de playoffs desde que existe el reloj de posesión, dato que por sí solo define lo fueron los de Doc Rivers a la hora de la verdad.
Dicha situación estuvo personificada en un Joel Embiid que, ante un gran Al Hoford, volvió a colapsar a la hora de la verdad. El pívot no solo no pudo pasar de los 15 puntos, sino que llegó a ellos con un pobre 5/18 en tiros de campo que hizo evidente su incapacidad para imponerse. No obstante, no estuvo solo en sus problemas, pues ni James Harden (3/11) ni Tyrese Maxey (5/12) terminaron de estar tampoco a la altura, dejando a un Tobias Harris habitualmente cuestionado y sus 19 tantos como lo más destacable del partido más importante de la franquicia en todo el curso y quién sabe en cuántas temporadas.
Tatum tampoco encontró muchísimos más socios ofensivos, pues solo Jaylen Brown y Derrick White llegaron a los dobles dígitos, pero no hizo le falta más. Sus 25 puntos al descanso mantuvieron cerca en el marcador a unos Celtics dubitativos, y los 17 del tercer cuarto contribuyeron a terminar de reventar el partido y mandar a los 76ers a la horca. Y es que, un año más, el techo para los de Pensilvania vuelve a ser el mismo. Y van…
Flashback de 2020
Con la victoria de los de Massachusetts, las Finales de Conferencia repiten lo ocurrido en 2020 en la burbuja de Orlando, lo cual abre la puerta a revanchas y a medir cuántos cambios ha habido en el statu quo de la liga. Celtics y Nuggets tienen la oportunidad de demostrar que sus proyectos han madurado lo suficiente como para cambiar lo ocurrido hace tres años, mientras que Heat y Lakers pueden demostrar que siguen teniendo cuerda para rato por muchos cambios que haya habido en sus plantillas. En unos días, tendremos a los dos últimos candidatos al anillo. Que empiece la fiesta.
(Fotografía de portada: Adam Glanzman/Getty Images)