El regreso de Irving a Boston tras su polémico paso por la franquicia ha sido una de las historias más seguidas de estas Finales en su previa, pero una vez que se ha producido el rencuentro este ha resultado, al menos para el propio jugador, decepcionante. El base, que nunca terminó de cuajar en la franquicia durante su etapa y ha tenido polémicas posteriores como sus declaraciones llamando racistas a los aficionados o su actitud en la serie de 2021 como integrante de los Nets, ha reconocido que esperaba unos abucheos más intensos, y que su expectativa para el segundo partido es la misma.
«Pensaba que habría más ruido, y espero lo mismo para el Game 2» comentó. «Que la grada esté intentando distraerme tanto a mí como a mis compañeros y sacarnos de nuestro elemento».
Siendo honestos, no hizo falta que la grada se encargase de ello porque los propios Celtics se las apañaron bastante bien para hacer que los Mavericks no se parecieran a sí mismos casi en ningún momento. Y precisamente Kyrie fue uno de los que más lo acusó. El base se quedó en un 6/19 en el tiro y estuvo muy lejos de ser una amenaza para la defensa local, aunque él parece creer que tuvo mucho más que ver consigo mismo que con el trabajo del rival.
«Creo que tuve buenos tiros» señala, lo cual no es del todo falso dado que algunos de sus triples llegaron cuando estaba completamente solo. «Pero el balón rebotaba en la parte de atrás del aro o se me iba un poco a un lado. Tengo que mantener la confianza durante toda la serie. Esta es la mejor época del año para jugar, porque solo quedamos dos equipos con vida. Hay que poner eso en perspectiva.
Dallas necesitará la mejor versión de Irving si quiere plantar cara a unos Celtics que lucieron arrolladores en varios tramos del Game 1, y el base parece ser consciente de eso. En estos playoffs se le ha visto ser muy irregular, cambiando radicalmente no solo de un partido a otro sino también dentro de un mismo encuentro, por lo que su capacidad para recuperarse de su mala noche está fuera de toda duda. Pero el margen de error es cada vez más pequeño. ¿Podrá tener su gran noche entre los abucheos de Boston?
(Fotografía de portada: Maddie Meyer/Getty Images)