Tras conocerse la sanción de dos partidos impuesta por la liga, J.R. Smith acudió a su perfil de la red social Instagram para pedir públicamente perdón por el tremendo manotazo que le soltó a Jae Crowder durante el cuarto partido entre sus Cleveland Cavaliers y los Boston Celtics.
El escolta, que acumula un historial que no le acompaña, llevaba muy centrado desde que aterrizó en Ohio, por lo que la acción del domingo pudo sorprender a muchos.
«No es el jugador que quiero ser, no es el jugador que quiero que vean mis compañeros y mi familia, no es la persona que quiero que los fans vean, pero mejoraré. Debo mejorar como jugador y como persona«, escribió Smith.
El post, como ya parecía evidente, termina de aclarar que la acción estuvo muy lejos de ser involuntaria.