Jalen Suggs ha respirado tranquilo. El guard de Orlando se vio obligado a abandonar el parqué en el amistoso disputado hace unos días ante Dallas por una lesión en la rodilla izquierda. A falta de pruebas, había miedo a que la dolencia fuera grave y afectase a los ligamentos. Por suerte, se ha quedado en un esguince de la cápsula de la articulación y un hematoma óseo.
«Estas cosas realmente pueden ir solo de dos maneras: puedes verte en la peor situación o ser algo manejable. Afortunadamente, en esta ocasión se ha tratado de algo manejable», comenta a Khobi Price de The Orlando Sentinel en relación a una lesión que le impedirá iniciar la temporada regular, pero que no debe tenerle apartado de las canchas demasiado tiempo.
Justo sobre el posible periodo de baja habló con el citado medio de Florida el cirujano ortopédico Tony Wanich. Según el doctor consultado, Suggs debería regresar a las canchas en algún momento del mes de noviembre. Así explica la lesión del jugador de los Magic.
«Una lesión de la cápsula generalmente tarda en sanar aproximadamente de dos a cuatro semanas, pero el hematoma óseo por lo general toma un poco más de tiempo y se acerca más a la línea de tiempo de seis semanas, dependiendo de cómo de extenso se el mismo», recalca.
No es una mala perspectiva para el jugador de segundo año de Orlando, quien la campaña pasada ya tuvo que lidiar con diversos problemas físicos que le permitieron jugar únicamente 48 partidos.
(Fotografía de Tim Nwachukwu/Getty Images)