Porcentaje de victorias del 78,9 por ciento, sólo superado en toda la NBA por los Celtics. Líderes en solitario del Oeste con 15-4 y cuatro triunfos seguidos. Todo lo bueno que se podía esperar de los Rockets se está dando en este primer parcial de la 2017-18. Houston es un equipo fuerte, candidato a todo y con una actitud y un líder que hace soñar en Texas con cotas muy altas.
James Harden, 37 puntos y 10 asistencias, volvió a ser el jefe de los Rockets. La Barba no sólo lideró la remontada de los suyos, que entre el descanso y el inicio del tercer cuarto ya habían solventado los adversos 21-3 y 29-7 de inicio. También Harden llegó a los 30 partidos de al menos 35 puntos y 10 asistencias, algo que no ha logrado nadie en la NBA, según datos de StatMuse.
A big performance for @JHarden13 and he’s your #FantasyPlayeroftheNight!
He put up a line of 37 PTS, 10 AST, 3 STL & 2 REB for 62.4 FPTS! #NBAFantasy pic.twitter.com/rUS9ficDRO
— NBA Fantasy (@NBAFantasy) 26 de noviembre de 2017
Paul: a falta de tiro, asistencias
Récord de pases a canasta de Chris Paul con los Rockets. El base, presumiblemente recuperado ya de sus problemas de rodilla, volvió a ser titular para repartir 13 asistencias a sus compañeros, sin duda su mejor trabajo del partido, en un duelo donde se vio negado de cara al aro. Paul sólo pudo alcanzar los 6 puntos, con 2/12 en tiros de campo y 0/4 en triples, pero solventó bien el encuentro con una buena dirección.
Beasley y O’Quinn dan la talla
Titulares ambos, ante las bajas de Kristaps Porzingis y de Enes Kanter, respondieron muy bien a la oportunidad de un Jeff Hornacek que no obstante no tenía muchas más alternativas. Michael Beasley firmó 30 puntos, 8 rebotes y 2 asistencias, sus prestaciones más altas con los Knicks, mientras que Kyle O’Quinn hizo un doble-doble brillante, pero insuficiente, de 20 puntos y 15 capturas. Su 16º doble-doble en la NBA es el más completo de todos cuantos ha registrado.