El golpe que se están llevando los Celtics es de dimensiones bíblicas. El 97% de probabilidades que les daba ESPN para estar en las Finales no es que esté saltando por los aires, es que los Heat lo están haciendo añicos. Tras ganar los dos primeros partidos en Boston, los de Florida han ido más allá en el Game 3 para propinar a los verdes una paliza por 128-103.
La situación es la que es. Las finales de la Conferencia Este están encumbrando a los Heat y dejando en muy mal lugar a unos Celtics incapaces de responder. Jaylen Brown resume con estas palabras el sentir del equipo. «Ni siquiera sé por dónde empezar. Podemos señalar con el dedo. Pero, en realidad, simplemente es vergonzoso», comenta.
Mientras el alero se centra en el colectivo, Joe Mazzulla, head coach del equipo, entona el mea culpa al no dar al equipo las herramientas necesarias para poder batir a Miami. Lo cierto es que si las cosas no cambian mucho, el técnico puede quedar muy señalado. «Simplemente no los tenía listos para jugar. Tengo que ponerlos en un lugar correcto para que estén listos para jugar, y eso depende de mí», expresa.
Lo que sin duda está llamando la atención es ver a los Celtics dar un enorme paso atrás en playoffs en cuanto a su defensa. Si en temporada regular tuvieron en segundo mejor rating defensivo, ahora ocupan la 10ª plaza al permitir tres puntos más por cada 100 posesiones. «Sí, creo que parte de esa identidad defensiva se ha perdido. Tenemos que recuperarla», comenta el técnico.
En una noche para olvidar, tampoco Jayson Tatum estuvo al nivel que se espera de él. 14 puntos con un 6 de 18 en tiros de campo se queda lejísimos de lo que necesita su equipo. Así explica lo vivido. «Esta noche fue dura. Desde el comienzo del partido estábamos perdiendo el balón. No lanzamos bien a canasta y ellos lo hicieron extremadamente bien. Parecía que nunca íbamos a recuperarnos».
Las sensaciones en Boston son incluso peores que el resultado de la eliminatoria (3-0 abajo), si es que se puede. Sin embargo, Tatum tiene claro que bajar los brazos y dejarse llevar el martes es algo que no puede ocurrir. Toca apretar los dientes sea cuál sea el resultado final.
«A pesar de lo dura que fue esta noche, simplemente tenemos que tratar de seguir adelante. Prepararse, entrenar, ver el vídeo, y todo eso para mañana. Obviamente estamos en una posición difícil, pero tenemos que tener algo de orgullo, recuperarnos y ser mejores el martes», sentencia.
(Fotografía de Adam Glanzman/Getty Images)