El pívot de Philadelphia realizó su mejor partido de la temporada al concluir con 38 puntos y 13 rebotes
Joel Embiid respondió a las críticas de Shaquille O’Neal y Charles Barkley de la mejor manera posible: realizando un enorme partido en Boston para vencer a los Celtics. El pívot, antes del partido, admitió que tenía que jugar más duro. Una vez se produjo el salto inicial, las palabras se convirtieron en hechos para desgracia de los verdes. «Me gusta que me critiquen. Que digan que tengo potencial para ser el mejor del mundo. Aún no lo he demostrado. Tengo que jugar más duro».
Con 36 minutos en pista, el dos veces All-Star se marchó hasta los 38 puntos (16 en el último cuarto), 13 rebotes, 6 asistencias y 1 tapón; una exhibición de cualidades para jugar al baloncesto que terminó por hacer claudicar a los Celtics por 109-115. Al concluir el encuentro, su técnico, Brett Brown, no tenía más que elogios para su pupilo. «Todas las cosas con las que ha estado lidiando las manejó como un adulto, con humildad. Y además respondió de un modo tremendo. Fue dominante, un líder. Sin duda completó uno de sus mejores partidos como Sixer«.
Más allá de la gran actuación del center, en los de Pensilvania volvió a destacar Tobias Harris, quien concluiría la noche con 23 puntos, 8 rebotes y 7 asistencias. También estuvieron por encima de la decena de puntos Mike Scott con 15 (cinco triples) y Josh Richardson con 14.
Philadelphia se impuso, sí, pero no lo tuvo nada sencillo. Aunque se pusieron nueve puntos arriba a poco más de dos minutos por jugar, Boston se repuso para colocarse a un solo punto cuanto restaban 27 segundos de encuentro con un triple de Jayson Tatum. Ahí también apareció Embiid para anotar dos tiros libres y realizar una posterior defensa que prácticamente certificaba la victoria de los suyos.
Por parte de los Celtics el máximo anotador fue Kemba Walker con 29 puntos a los que añadió 8 asistencias. Tras él, Gordon Hayward conseguiría 19 puntos mientras que Jayson Tatum se quedaría en 15.
Horford, ovacinado
Al Horford no pudo jugar debido a problemas en la rodilla y los isquiotibiales. Sin embargo, ello no evitó que recibiese una gran ovación cuando se mostró su imagen en el vídeo marcador de los verdes. El pívot, quien correspondió al cariño de los aficionados con un saludo, pasó hasta tres temporadas como jugador de los Celtics antes de firmar este verano con los 76ers como agente libre. Durante su estancia en Massachusetts Horford disputó en dos ocasiones las finales de conferencia sin poder alcanzar la gran final.
(Fotografía de Maddie Meyer/Getty Images)