Las cosas entre Jonathan Kuminga y Steve Kerr podrían haberse torcido de manera irreparable. Según informa el medio The Athletic, el jugador de los Golden State Warriors ha dejado de confiar en el entrenador después de que lo sentase durante los últimos 18 minutos de la derrota de este jueves contra los Denver Nuggets.
«Fue la gota que colmó el vaso», afirmó una de las fuentes consultadas, quien añadió que Kuminga piensa que no alcanzará su máximo potencial mientras continúe a las órdenes de Kerr. Kuminga registró 16 puntos en los 19 minutos que estuvo en pista. Sin embargo, el ‘head coach’ de los Warriors optó por dar minutos a Andrew Wiggins, Klay Thompson y Brandin Podziemski en el periodo definitivo. Aun así, Kerr elogió el rendimiento de Kuminga y reconoció su error.
«Estaba jugando muy bien», afirmó el técnico. «Su momento habitual para volver a entrar habría sido sobre los cinco o seis minutos [del último cuarto]. Wiggins estaba jugando muy bien, estábamos avanzando, arriba por 18 o 19 puntos. Así que nos quedamos con él en pista. Luego no me pareció lo correcto, pero me quedé con el grupo que ya estaba y, finalmente, no pudimos cerrar el partido».
Los Warriors estaban abajo 85-84 cuando sacaron a Kuminga del partido. Para cerrar el tercer cuarto, el quinteto que incluía a Wiggins en lugar de Kuminga ayudó a construir una ventaja de 13 puntos que aumentó hasta los 18 tantos a seis minutos del final del encuentro. Kerr no volvió a poner al joven ala-pívot en la cancha y los Warriors desperdiciaron esa ventaja, la cuarta vez esta temporada que tiran por la borda un colchón de, al menos, 18 tantos.
Ahora, solo queda por preguntarse si esta reacción ha sido simplemente fruto de la frustración o si supone la antesala de un potencial traspaso antes del cierre de mercado con el objetivo de ‘apagar el incendio’ y reconducir el rumbo de una campaña que empieza a complicarse de forma preocupante en la Bahía de San Francisco.
(Fotografía de portada de Thearon W. Henderson/Getty Images)