Klay Thompson se mostró hace unos días dolido con respecto a su nuevo rol en los Warriors, mucho menos protagónico que el de hace unas temporadas, pero esto no significa que no esté dispuesto a aceptarlo. En unas nuevas declaraciones ofrecidas a Logan Murdock, periodista de The Ringer, el escolta ha hablado de cómo cree que serán los próximos años de su carrera, y ha reconocido que está dispuesto a aceptar un papel menor para seguir en un entorno competitivo tal y como hicieron otros hombres con un juego similar al suyo.
«No creo que tenga nada de malo» reconoció con respecto a la idea de aceptar un papel secundario. «El año que viene tendré 35 años y vengo de lesiones en el cruzado y en el Aquiles, pero sigo teniendo la capacidad de ser un buen jugador. Quizás ya no soy alguien que meta 60 puntos en tres cuartos o 37 en uno, pero sigo siendo una amenaza en la pista. He inspirado mi estilo de juego en Reggie Miller y Ray Allen, y ambos fueron jugadores muy efectivos hasta los treinta y muchos, así que espero seguir ese camino».
Klay está firmando la peor temporada en cuanto a acierto exterior de su carrera (37,3%), pero sigue teniendo noches en las que puede ser una verdadera pesadilla para la defensa rival. Donde más se nota su caída de rendimiento es en defensa, pues aunque nunca se le reconoció tanto como su habilidad como triplista, fue durante muchos años un defensor perimetral excelente. Consciente de ello, parece dispuesto a asumir un rol más limitado que le permita explotar mejor su capacidad como tirador, asemejándose en ese sentido a los dos hombres a los que menciona.
Ray Allen tuvo en los Heat el papel más secundario de su carrera, partiendo desde el banquillo y jugando y anotando menos que nunca, pero nadie se atrevería a cuestionar su rendimiento o importancia en el segundo anillo de Miami. De hecho, fue precisamente en esa etapa cuando anotó una de las canastas más importantes de la historia de la NBA. Miller, por su parte, fue también perdiendo peso en los Pacers con la llegada del siglo XXI, pero continuó siendo un jugador valioso tanto en temporada regular como en playoffs. Y ambos lo hicieron con salarios significativamente menores que en sus mejores años.
«Creo que este es un grupo muy especial, y haber ganado varios anillos juntos ha creado un vínculo para toda la vida. Esa es seguramente la mejor parte de este trabajo» prosiguió Thompson, que parece decidido a seguir en Golden State incluso si le llegan ofertas mejores de otros equipos. «Más que el dinero y que la fama, me quedo con la relación que tengo con ellos».
(Fotografía de portada: Tim Nwachukwu/Getty Images)