Cuando no es uno, es otro. O incluso otro más. A Golden State parece que no se le acaba el arsenal nunca y en una noche en la que Stephen Curry estuvo discreto, Klay Thompson sacó el fusil.
Los Warriors se impusieron a Dallas Mavericks por 127–107 gracias a los 45 puntos de Thompson, su mejor marca de la temporada. El escolta encestó 7 de los 12 triples que lanzó y los 10 tiros libres que le fueron concedidos. Curry terminó con solo 14 puntos tras una mala primera parte en la que se quedó en 1 de 8 en tiros de campo.
Por los Mavs, que no pudieron contar con Dirk Nowitzki por descanso y Zaza Pachulia y Devin Harris por lesión, el mejor fue Chandler Parsons con 23 puntos y 7 rebotes. J.J. Barea aportó 14 puntos y 5 asistencias desde el banquillo.
Golden State se encuentra en un momento espectacular como atestiguan varios datos. Son ya cinco partidos consecutivos anotando al menos 120 puntos, algo que no sucedía en la NBA desde hace más de dos décadas, cuando lo hicieron los Phoenix Suns en 1993 según recuerda ESPN Stats.
Segunda mejor racha de la historia
Los Warriors alcanzaron anoche las 40 victorias seguidas como local, empatando a Orlando Magic de entre 1995 y 1996 por la segunda mejor racha de triunfos de la historia de un equipo en casa. Los Chicago Bulls de entre 1995 y 1996 siguen teniendo la mejor marca con 44 victorias consecutivas también entre 1995 y 1996.
El equipo de Steve Kerr, además, no ha perdido en casa en temporada regular durante más de un año. La última derrota fue el 27 de enero de 2015 ante Chicago.
Mejor arranque tras 46 partidos
Después de este último triunfo, Golden State se queda empatado con los Philadelphia 76ers de la temporada 1966–67 como los dos equipos con mejor balance después de 46 partidos con una marca de 42–4. Detrás quedan otros tres conjuntos míticos con 41–5: los Bulls de las campañas 1995–96 y 1996–97 y Los Angeles Lakers de 1971–72.