Buenas noticias para Dallas Mavericks. Después de incorporarse hace algo más de una semana al trabajo del equipo de manera parcial, Kristaps Porzingis completó ayer su primer entrenamiento completo y sin restricciones con sus compañeros, tal y como ha anunciado su entrenador, Rick Carlisle.
Esta noticia supone un paso más de cara a cumplir con lo previsto; es decir, verle de nuevo sobre las canchas de la NBA en el mes de enero. El head coach de la franquicia de Texas ha señalado que no hay un calendario exacto para que juegue sus primeros minutos del curso 2020-21, pero sí anuncia que ese momento podría ser realidad en un par de semanas.
Dallas necesita a Porzingis. Pese a que el equipo se ha recuperado de las dos derrotas iniciales vapuleando a Los Angeles Clippers por 51 puntos de diferencia, a nadie escapa que el jugador letón otorga al equipo unas opciones ofensivas y defensivas que sin él no existen. Su envergadura, pese a no ser un jugador pesado, le permite intimidar bajo los aros. Su capacidad para lanzar triples tampoco se puede pasar por alto.
Tras aclimatarse a su nuevo equipo (jugó tres años en los New York Knicks) la mejor versión de Porzingis llegó en los pasados playoffs de la burbuja de Orlando. En primera ronda de playoffs, ante Los Angeles Clippers, disputó tres partidos para promediar 23,7 puntos y 8,7 rebotes con un 52,9 por ciento en triples. Ahí quedó todo por culpa de una lesión. Si consigue volver y recuperar un nivel cercano a ese, en Dallas podrán sonreír con más razón a lo largo del curso 2020-21.
(Fotografía de Christian Petersen/Getty Images)