Los Charlotte Hornets son uno de los equipos de situación más peliaguda en la NBA. Tras perder a Miles Bridges entre acusaciones que le podrían llevar a 12 años de prisión, la franquicia de Michael Jordan apenas se ha movido en el mercado para mejorar un proyecto que ya lucía algo estancado. Por eso mismo se decidió prescindir de James Borrego y contratar a Steve Clifford no sin inconvenientes surgidos por el camino. Al nuevo técnico, o al menos esa imagen quiere transmitir, le dan igual los problemas surgidos. Su único objetivo es que el equipo mantenga el ritmo ofensivo mientras mejora ostensiblemente su rendimiento atrás.
Para ello, Clifford se ha mostrado crítico con el último año de su anterior etapa, donde priorizó lo ofensivo con resultados poco satisfactorios. «Siempre tuvimos una buena defensa, así que me centré en mejorar el ataque pensando que tendríamos un buen equipo [en la 2017-18]. La defensa nunca llega a funcionar. Hice un trabajo pobre. Pero aprendí que cada año tienes que empezar trabajando las cosas de cero» le cuenta el técnico a Joe Vardon para The Athletic.
Desde su primera rueda de prensa Clifford ha dejado claro que la prioridad debe de ser mejorar la defensa, pero admite que antes debe asentar una base. «Estamos trabajando para recuperar las cosas buenas que se hicieron el curso pasado y así asegurar que seremos un equipo al menos tan bueno como ese y podremos crecer en otras vías». Gran parte de la mejora defensiva parte de convencer a los jugadores de tomar responsabilidades a ese lado de la cancha. Algo de lo que Clifford no está completamente convencido. «Encontraremos la manera. No estoy esquivando la pregunta, es solo que con tan pocos días de trabajo es difícil sacar conclusiones. Pregúntame dentro de cinco o seis semanas y te podré dar una idea más clara».
(Fotografía de portada de Jared C. Tilton/Getty Images)