Pocas veces vemos algo así con un entrenador. Restando poco menos de dos minutos para el final del partido entre Phoenix Suns y Minnesota Timberwolves, en el cual los segundos certificaron su pase a segunda ronda de playoffs, Mike Conley chocando y lesionando a su entrenador en Minnesota, Chris Finch.
Nada más recibir el golpe Finch se echó mano a su rodilla derecha con ostensibles gestos de dolor. Después de que se acercasen jugadores y técnicos, fue ayudado a abandonar la cancha con 1:40 minutos en el marcador. Parecía que se había hecho mucho daño y así ha sido confirmado, ya que ha sufrido una rotura del tendón rotuliano de la rodilla derecha.
Finch abandonó abandonó en silla de ruedas el pabellón de los Suns, donde certificaron la barrida por 4-0 para que los Wolves estén en segunda ronda por primera vez en 20 años. El head coach de Minnesota se fue sin atender a los medios, siendo su asistente, Micah Nori, quien asumió tales funciones.
Pese a la mala noticia de que un choque fortuito se haya convertido en una dolencia tan importante, en Minnesota existe satisfacción por lo conseguido, incluyendo por supuesto al propio Finch. «Obviamente está de buen humor y los muchachos también. Todos tienen su papel y todos se apoyan mutuamente. Sé que suena cursi, pero se tarta de pasar al próximo hombre, incluso si se trata del cuerpo técnico», explica Nori.
(Fotografía de Christian Petersen/Getty Images)