Debido a la crisis sanitaria del coronavirus, la NBA también guarda sus espaldas. Se protege para evitar males mayores. Mientras la Liga presentará este miércoles la idea de jugar partidos a puerta cerrada a las 30 franquicias, también ha enviado una guía de conducta que será de obligado cumplimiento para todas las organizaciones que toman parte en la competición.
En esos patrones de comportamiento recién impuestos, la NBA, al igual que el resto de ligas profesionales de Estados Unidos, ha incluido limitar el acceso a los vestuarios solo al personal relacionado directamente con cada franquicia, como pudo informar ESPN a través de una información de Adrian Wojnarowski y Zach Lowe.
Ese personal que tendría acceso a los vestuarios pasaría por jugadores, técnicos, directivos, trabajadores de cada organización, etc. Quedarían excluidos por tanto del acceso al lugar más íntimo de los equipos los periodistas y todo tipo de medios de comunicación.
Insistimos que esta medida de la NBA ha sido impuesta de manera coral por las ligas profesionales de béisbol (MLB), fútbol (MLS) y hockey hielo (NHL).
Hay que tener en consideración que en Estados Unidos y en la NBA el acceso de los medios a las zonas más íntimas de los equipos, los vestuarios, es un santo y seña. Una doctrina innegociable de la Liga y de cómo entender el producto que se vende al espectador. Esa parte esencial de la competición también sufrirá la cuarentena por culpa de la crisis del coronavirus.
A cambio del no acceso mediático a los vestuarios, ESPN reveló que se habilitará una zona para que los protagonistas atiendan a la prensa fuera de los mismos. En ese nuevo formato, se planea establecer una distancia de seguridad entre jugadores y prensa de unos 6-8 pasos.
La NBA alegó que estas medidas responden a las recomendaciones de expertos en salud pública y enfermedades infecciosas.
(Fotografía de portada: Mario Tama/Getty Images)