La NBA ha multado este martes a Derrick Rose con 25.000 dólares por criticar a los árbitros tras el partido entre Chicago y New York.
Al término del encuentro que enfrentó a Bulls y Knicks, Rose se mostró visiblemente molesto. «Debo ser la única superestrella de la liga que está pasando por lo que estoy pasando yo ahora mismo», comentó el base de los Bulls en referencia a las faltas no sancionadas.
Rose sabía que iba a ser sancionado por estas palabras y la NBA no ha dudado en multarle por primera vez en sus cuatro años de carrera. «No me puede importar menos», cuando fue preguntado el lunes si temía una sanción.
Tim Thibodeau defendió a su jugador, «Él (Rose) no se suele quejar. Si dice algo, es porque tiene algo que decir. Es un tipo difícil de arbitrar por su rapidez y fuerza, no sabes cuando es golpeado.»
