18 ex-jugadores de la NBA han sido acusados de defraudar al Plan de Salud y Bienestar que provee la propia Liga a jugadores en activo y retirados. La cantidad total demandada es de cuatro millones de dólares. Dicha denuncia se debe a la petición de servicios médicos y dentales que nunca se llegaron a impartir. Según información recabada por la ABC, el cabeza de la operación es Terrence Williams, exjugador de Nets, Celtics, Rockets y Kings. Los jugadores implicados habían percibido ya 2,5 millones de la suma total a la que apela la denuncia.
Sebastian Telfair, Glen Davis y Darius Miles eran los principales operadores de la red de fraude, pero la lista se extiende a unos cuantos conocidos más. Alan Anderson, Tony Allen, Desiree Allen, Shannon Brown, Will Bynum, Christopher Douglas-Roberts, Melvin Ely, Milton Palacio, Ruben Patterson, Eddie Robinson, Greg Smith, Charles Watson, Antoine Wright y Tony Wroten completan la nómina de imputados.
También se apunta a los centros médicos implicados. Estos son una clínica quiropráctica de Encino, California; dos centros dentistas en Beverly Hills y un centro médico en Washington. En principio estos centros no se verán perjudicados por la demanda.
(Fotografía de portada de Ronald Martinez/Getty Images)