Lamar Odom regresa a las canchas. El ala-pívot de 38 años, quien no juega en la NBA desde el curso 2012-13 con Los Angeles Clippers, ha anunciado a través de su cuenta de Instagram que disputará la liga china. Por el momento desconocemos con qué equipo firmará, pero sin duda es una fantástica noticia verle de nuevo en activo tras varios años en los que era siempre protagonista por noticias extradeportivas.
En el comunicado que ha hecho desde Rotterdam, donde se encuentra en estos momentos, Odom asegura que su corazón está en perfecto estado y que finalmente puede compartir con todos su vuelta al baloncesto, anunciando que eso ocurrirá en China. Tras comunicar su retorno da gracias por tener esta oportunidad y agradece a los aficionados todo el amor y apoyo recibido en estos duros años. Para terminar asegura que los milagros ocurren y que el baloncesto y sus niños han sido siempre la luz de su vida; haciendo mención especial a Stephon Marbury por ser su inspiración. He aquí el mensaje original:
A la espera de ver que se haga realidad este anuncio, no podemos sino alegrarnos por él. Desde que dejó los Lakers, momento en el que según Odom acabó su carrera, su situación fue empeorando fuera de las canchas hasta ese momento de 2015 en el que todos quedamos consternados.
Era 14 de octubre, una nueva temporada estaba a punto de empezar, y nos enterábamos de que este chico formado en Rhode Island era encontrado inconsciente en un club. Esa primera información fue la antesala de momentos realmente duros al conocer pocos días después que su estado era crítico. Esquivó la bala, pero apenas había dado unos pasos en su recuperación.
Ya en 2016, exactamente en diciembre, Odom optaba por ingresar voluntariamente en una clínica de rehabilitación. El objetivo de tal decisión, según una fuente cercana al jugador, era asegurarse el seguir sobrio y en el buen camino, algo que ahora parece haber llegado a la última etapa con el anuncia de su regreso.
Su mejor momento
Junto a Phil Jackson y en Los Ángeles. En ese entorno fue en el que el ala-pívot mostró todo su talento para ser pieza clave en un equipo que se llevó dos anillos. Jugador total, tan capaz de marca diferencias iniciando jugadas o defendiendo con unas y dientes, pasó hasta siete campañas en Lakers antes de pasar las dos últimas en Mavericks y Clippers. Dejó la NBA con 14 temporadas a sus espaldas y un promedio de 13,3 puntos, 8,4 rebotes y 3,7 asistencias.