LeBron James es el segundo jugador de la NBA que más tiempo se emplea en cada partido. 37,6 minutos de promedio a sus 32 años de edad. Cualquiera pensaría que cronómetros tan osados son hasta arriesgados, más en temporada regular. Sin embargo los Cleveland Cavaliers no tienen pensado aminorar el grifo de su estrella. Él mismo lo ha reconocido y está de acuerdo.
«Estoy bien. El entrenador hará un buen trabajo vigilando mis números e intentando que descanse durante los partidos, pero no me veo bajando el ritmo. Mis números son altos pero hemos estado en una buena situación. Si descanso unos pocos minutos aquí, durante el partido, otro par allá, en días de descanso, cosas así, estaré bien», recalcó LeBron James este miércoles, en declaraciones recogidas por ESPN.
Parecer ser que la generosa cantidad de minutos no es cuestión solo de Tyronn Lue, técnico de los Cavs, sino que es maniobra meditada y acordaba con el propio LeBron.
Reducción en febrero
Esto contrasta ligeramente con las pretensiones de la propia estrella de Akron, que se ha hartado de repetir que su equipo necesita refuerzos (sobre todo un base). Y antes de que lleguen, él mismo continúa jugando más que nadie en Cleveland y casien toda la NBA.
Lue había alegado en el mes de noviembre que, de manera gradual, los minutos de LeBron James irían adelgazando por momentos. Pasando del intervalo 36-38 a los 32-34 para comienzos de febrero. Es decir, ahora mismo. Los planes parecen haber cambiado pues, ya que el alero de los Cavs sigue en una cantidad de minutos muy similar a la de toda la temporada.
De hecho, en los dos últimos dos encuentros (en uno de ellos con célebre prórroga ante los Wizards), James ha estado en 42 y 40 minutos. Y desde el 23 de enero, está en una media de 38,9.
Cerrar los partidos
«Hemos estado hablando sobre ello. Él (LeBron) no quiere bajar el ritmo porque dice que está en buena dinámica ahora. Si tenemos la posibilidad, tenemos que darle descanso. Cuando cogemos ventaja con los rivales, tenemos que cerrar los partidos y tendrá menos minutos. Ir 26 arriba en el cuarto cuarto y de repente él tiene que jugar minutos extra que no debería (porque el partido se ajusta). Tenemos que ser conscientes de eso», alegó al respecto Tyronn Lue.
Precisamente en esa materia está uno de los principales escollos para el minutaje de LeBron. Si los Cavs no matan a sus rivales hasta los últimos segundos, James siempre tiene que actuar de oficio.
Con los rivales pataleando o no, siempre que haya algo en juego, LeBron James acude a la llamada. De ahí, y la periódica inconsistencia de Cleveland en muchos partidos, proceden los excesos de la superestrella de los Cavs.
Uno de cada diez
Otra de las estrategias en el plan de descanso de LeBron es, según fuentes de ESPN, que el jugador descanse un partido de cada diez jugados a partir de ahora.
El problema es que cuando James no ha jugado esta temporada, los Cavs presentan un revelador balance de 0-3. Y eso contando que solo se ha perdido tres noches de 50 en total.
Así es que mientras Cleveland presente diagnóstica inconsistente, LeBron tendrá que hacer horas extra. No es negativo ni todo lo contrario. Simplemente, los kilómetros tienen memoria y pueden volverse en contra durante los playoffs.