Los Lakers pasaron por San Francisco como un ciclón. Pese a que los Warriors llegaban al partido tras vencer al mejor equipo de la temporada (Utah Jazz) apenas fueron rival para los angelinos, que dejaron el encuentro visto para sentencia en el tercer cuarto para navegar cómodamente hasta el 97-128 final.
Gran parte de culpa de que los de oro y púrpura se mostrasen así de rotundos la tuvo LeBron James. Nadie se sorprende de verle jugar a un excelso nivel, pero firmar 22 puntos, 10 rebotes y 11 asistencias en 30 minutos nunca puede ser pasado por alto. Cuarto triple-doble de la temporada para El Rey.
Junto a LeBron también tuvo una destacada actuación Montrelz Harrell, quien desde el banquillo lograría 27 puntos y 5 rebotes. Lo cierto es que el banquillo de los angelinos rozó la perfección: de los 128 puntos totales del equipo hasta 72 llevaron la firma de la segunda unidad. Más allá de esto, a Steve Kerr no le hizo gracia alguna que los Lakers viviesen cómodamente bajo los aros. «Lograron 68 puntos en la pintura. Eso es inaudito», espetó el head coach de los Warriors.
En Golden State nadie acabó contento (y con razón). No solo perdieron, sino que fueron vapuleados. Stephen Curry jugó bien. Suyos fueron 27 puntos con un 4 de 7 en triples, pero ello no mitigó el dolor por una derrota contundente. «Tenemos que cansarnos de que nos destrocen así, porque es vergonzoso. Tenemos que mostrar más orgullo cuando jugamos. Puedes perder partidos, es algo que va a ocurrir, pero no así».
Curry, récord de asistencias
El lado dulce de la noche para el dos veces MVP de la NBA llegó al convertirse en el máximo asistente de la historia de Golden State Warriors. Stephen Curry comenzó el partido con 4.854 asistencias, una menos de las que tiene Guy Rodgers. A los tres minutos de partido un pase del base a Kelly Oubre Jr. le colocaba como líder histórico.
«Es especial. Es una especie de premio a la longevidad. Es fantástico estar 12 años en un mismo equipo y, con suerte, muchos más. Ha habido grandes jugadores que han estado aquí mucho tiempo. Cada vez que consigues algo o alcanzas el primer puesto en alguna categoría en la franquicia, es bastante especial. Ojalá fuera en circunstancias diferentes, obviamente, a las del partido de esta noche», explica.
(Fotografía de Thearon W. Henderson/Getty Images)