A Lloyd Pierce, técnico de los Atlanta Hawks, le va el riesgo. Trae Young, número 4 del Draft (tres a efectos prácticos) ameriza en la NBA con la fama de ser el mejor tirador de su promoción. Tras los ‘Nasri, el nuevo Zidane’, y el ‘Igram, el nuevo Durant’, llega Young, el nuevo Curry.
Y claro, normal que con tales expectativas al chaval le está haciendo algo cuesta arriba la preseason.
Por eso decimos que a su nuevo coach le va el riesgo. Porque cuando tu flamante base tirador te arranca el partido con un 1/11 y lo cierra con un 5/16, y afirma en declaraciones postpartido que estamos ante un jugador divertido de ver, el sarcasmo como reacción y las mandarinas como símil, se pone ciertamente en bandeja.
Mucho más que un ‘tirador’
Pero la realidad es que no iban por ahí los tiros. Porque Young no es tan solo un (tiempo al tiempo) gran lanzador; también es un magnífico distribuidor. En su único año en la Universidad de Oklahoma el point guard promedió 8,7 asistencias. Y a eso justo se refería su entrenador. «Su mejor talento reside en saber encontrar a sus compañeros. Cuando tienes a un jugador con semejante habilidad, la de distribuir juego de un modo creativo, se disfruta al verlo».
Efectivamente. Si el tiro lleva siendo la cruz desde las Summer Leagues, el pase comienza a reflejarse como la cara. Ayer, en la victoria ante los Pelicans, Young terminó como el mejor asistente del partido (por delante de las siete de Elfryd Payton) con ocho pases de canasta.
Y qué queréis que os diga; eficiencia no sé, pero esta asistencia de Young para Collins es la definición perfecta de diversión.
✔ Trae Young: 11 Ptos – 8 Asist
✔ John Collins: 18 Ptos – 3 Reb
Y ambos, esta maravillosa jugada !!!
Ojo a esta pareja !!!! 🔥🔥🔥
— Atlanta Hawks España (@Atlanta_HawksEs) 2 de octubre de 2018
Diversión planificada, por otra parte. «Lo hemos estado probando en los entrenamientos», confiesa Young. “Estábamos esperando el momento en que pudiéramos hacerlo en un partido».