Shareef O’Neal, hijo del miembro del Salón de la Fama Shaquille O’Neal, busca convertirse en profesional esta temporada. A diferencia de lo que fue su padre, no es uno de los prospectos más codiciados. Sin embargo, en las últimas semanas ha aumentado el interés de varios de varios equipos por el joven jugador. Recientemente se informó de que se ha estado ejercitando con los Lakers. Ahora, son los Cavaliers los que están interesados en él.
La carrera universitaria de Shareef se vio empañada por lesiones y problemas de salud. Un problema cardíaco que aparentemente está solucionado le mantuvo fuera de las pistas durante varios meses. Pasó su carrera universitaria en UCLA y LSU, pero no obtuvo el protagonismo deseado y solo jugó en 37 partidos en tres temporadas, con un promedio de solo 11 minutos por duelo.
El joven O’Neal se enfrenta a una dura cuesta arriba para llegar a la NBA. Al igual que sucedió con otro jugador de segunda generación, Gary Payton, puede que Shareef tenga más opciones de llegar a un equipo a través de la agencia libre no reclutada. Si eso sucediera, los Cleveland Cavaliers parecen estar interesados en el pívot de LSU, ya que lo han reclamado para un entrenamiento junto con otros prospectos.
El hijo de Shaquille no es tan dominador como lo fue su padre y necesita encontrar otras formas de contribuir. Tiene un gran instinto ofensivo, ataca bien el aro y es un bloqueador de tiros decente. Quizás a día de hoy no esté preparado para el ambicioso desafío, pero tal vez después de unos años en la G-League y algún partido en la Summer League podría tener su oportunidad en la NBA.
(Fotografía por Emma McIntyre/Getty Images for Apple)