En un imagen de plena unidad se vio a todos los componentes de Utah, New Orleans y los equipos angelinos (incluyendo entrenadores y el resto del staff) echando la rodilla a tierra
La realización televisiva no lo mostró en directo pero, tal como se había especulado en los últimos días, los jugadores, técnicos y staff de Utah Jazz y New Orleans Pelicans abrieron la veda arrodillándose durante la reproducción del himno estadounidense, una imagen que se repetiría pocas horas después con los integrantes de Los Angeles Lakers y Los Angeles Clippers como protagonistas. Con ello, fueron un paso más allá en la cruzada por la justicia social y la causa Black Lives Matter en la que se ha convertido la reanudación NBA de Orlando.
Todo el personal de pista de los equipos se arrodilló, como mostraron los periodistas acreditados en la burbuja a través de diferentes vídeos. Y no serán los últimos; a partir de ahora esto parece que se convertirá en costumbre en todos los encuentros de la reanudación. Así se vivió en el primer partido de la noche.
LeBron James por su parte mostró su pleno compromiso en la lucha por la justicia racial al igual que todos sus compañeros en la NBA. «Estamos lidiando con mucho racismo, mucha injusticia social y mucha brutalidad policial… No podemos levantar el pie del acelerador…», comentaba antes de asegurar que espera que Colin Kaepernick se sienta orgulloso. Esta fue la imagen antes del Lakers – Clippers.
No cejan en su empeño a la hora de mostrar su disconformidad con la realidad racial de los Estados Unidos; recrudecida después del asesinato de George Floyd en Minnesota hace varios meses.
De hecho, los jugadores NBA se encuentran ahora exigiendo justicia para Breonna Taylor, joven de 26 años natural del estado de Kentucky que fue asesinada por tres policías en su casa tras ser confundida con alguien que se dedicaba al tráfico de drogas. La práctica totalidad de jugadores de la Liga exigió estos días que la justicia estadounidense se ponga en marcha para juzgar a los culpables, que hasta la fecha no habían sido imputados o acusados de delito alguno.
Adam Silver, comisionado de la NBA, alegó que la muestra de apoyo con la causa Black Lives Matter vista en el partido Jazz-Pelicans, el arrodillamiento, no tendrá consecuencias.
«Respeto el acto de protesta pacífica de nuestros equipos en favor de la justicia social y, en estas circunstancias únicas, no haré cumplir nuestra regla de largo recorrido que requiere permanecer de pie durante la ejecución de nuestro himno nacional», pudo asegurar Silver, y recogieron periodistas acreditados en la burbuja como Mark Medina (USA Today).
En la NBA, desde 1981 —regla anterior incluso a David Stern— es obligatorio que el personal de pista, entre los que están jugadores y entrenadores, se mantenga de pie, quieto y en silencio durante la reproducción del himno.
Por cierto, este jueves publicamos un texto para explicar qué ha significado para entrenadores y propietarios el movimiento Black Lives Matter. Porque el discurso de los jugadores lo conocemos de memoria, pero no tanto el de sus superiores.
(Fotografía de Pool/Getty Images)