Con la derrota de los Boston Celtics en el pabellón de Cleveland, los New York Knicks regresan a los playoffs tras una sequía de ocho largos años.
Inmediatamente después de la noticia, Julius Randle expresaba a través de Twitter: «Estamos en la lista, Knicks. Pero todavía no estamos cerca de terminar».
Es la primera vez en su carrera que accede a unos playoffs, y a buen seguro que quiere aprovechar la oportunidad. Pero el trabajo todavía no está listo. Con el triunfo de Atlanta ante Washington se colocan a un partido por detrás de ellos, siendo sextos del Este empatados con Miami. En juego tienen alcanzar esa cuarta plaza, y la ventaja como locales.
Pero si ahora mismo finalizara la temporada regular, los Knicks se enfrentarían en primera ronda a los Bucks de Giannis Antetokounmpo, Khris Middleton y Jrue Holiday. Este año su récord contra ellos es de un favorable 2-1, aunque será un duelo realmente complicado.
Antes tienen tres jornadas seguidas en el Madison Square Garden, que verá ampliado su aforo al 30% a partir del 19 de mayo, de acuerdo al Gobierno del Estado de Nueva York. Los rivales son San Antonio, Charlotte y Boston para intentar escalar a esa cuarta plaza.
Los Knicks llegan de finalizar una exigente gira por el Oeste con un 3-3, y especialmente dolorosa fue la derrota en la prórroga ante los Lakers tras desperdiciar una ventaja de 10 puntos en el tramo final. Pero los chicos de Tom Thibodeau han demostrado a lo largo del curso que están capacitados para recomponerse.
«Al final del día, cuando te despiertes, has de tener amnesia», dijo Derrick Rose tras el choque en LA. «Pero ahora mismo es jodidamente difícil», reconoció el veterano jugador.
Randle, Rose y R.J. Barrett deberán aunar fuerzas si desean tener opciones reales de competir. Al canadiense se le pudo ver exhausto ante los Lakers con un 2 de 13 en tiros de campo, y apenas 8 puntos, incluido el último triple fallado.
Por su parte, Derrick Rose no puede soportar todas las noches 39 minutos. Su compañero Elfrid Payton ha quedado relegado a un segundo plano, pese a partir como titular en el primer y tercer cuarto. Los Knicks le necesitan más que nunca, pero también la vuelta de Alec Burks, aquejado por unas molestias de rodilla, y de un Immanuel Quickley con un esguince de tobillo que parece peor de lo que se esperaba.
(Fotografía de portada: Harry How/Getty Images)