Con el 3-0 a favor de Denver Nuggets parecía prácticamente cerrada la primera ronda de playoffs ante Lakers; sin embargo, la situación ha cambiado enormemente por dos motivos. El primero, que los angelinos se llevaron el cuarto partido para romper una racha de once derrotas seguidas ante los de Colorado. El segundo, que Jamal Murray es duda para el Game 5 por una distensión en los isquiotibiales.
Así es. Los Nuggets están en vilo porque una de sus dos grandes estrellas podría no estar disponible para el choque de esta noche y, lo que es más preocupante, si lo está no será en caso alguno al cien por cien.
Murray ya notó tal problema durante el anterior choque ante los de oro y púrpura, pero no abandonó la cancha. Ahora le puede tocar seguir jugando mientras soporta tal dolencia, la cual podría ser uno de los motivos de que su tiro en suspensión no está funcionando del todo bien en esta primera ronda de la postemporada. Para ser exactos, están lanzando un 38 por ciento en tiros de campo y un 21 por ciento en triples, muy lejos de los estándares que suele marcar.
Mientras en Denver viven estas horas con el susto en el cuerpo, en los Lakers existe cierta sensación de que pueden hacer realidad lo nunca visto en la historia de la NBA: levantar un 3-0 en contra en playoffs. LeBron James y Anthony Davis están jugando a un nivel fantástico y de cara a esta próxima madrugada podrían recuperar para la causa a Jarred Vanderbilt. Lo tienen realmente difícil, pero con un poco de fortuna pueden agarrarse a un serie que parecía acabada.
(Fotografía de Ronald Martinez/Getty Images)