Malik Monk está viviendo la temporada de su vida en los Sacramento Kings. En 2021, el escolta decidió apostar por él y firmar un contrato a la baja con Los Angeles Lakers. Un escenario que, de hacerlo bien, relanzaría su carrera. Y exactamente eso ha hecho Monk, convirtiéndose en una pieza indispensable en los mejores Sacramento Kings desde la era Rick Adelman y firmando una campaña candidatable para ser Mejor Sexto Hombre del curso.
Ahora, pocos meses antes de terminar su relación contractual con los Kings, Monk tiene más o menos claro cómo quiere que sea su futuro inmediato. «Me encantaría continuar en Sacramento. Estoy muy cómodo. Hice muchos amigos, la ciudad me quiere y yo amo la ciudad», admite en una charla con The Athletic. Aun así, sabe que esto no depende enteramente de él. «Depende mucho de lo que hagamos en postemporada».
En el mencionado verano de 2022, Monk firmó un contrato por dos años y 9,4 millones de dólares anuales. Menos de dos años después, se ha convertido en un complemento de lujo como combo guard. Efervescente como pocos, este curso promedia 15,9 puntos y 5,3 asistencias, ambos máximos de carrera. Cifras que deberían de proporcionarle un contrato bastanet más abultado que el actual. Aunque él cree que, con los que firmó el año pasado, debería haberle dado para ganar el galardón a Mejor Sexto Hombre.
(Fotografía de portada de Ezra Shaw/Getty Images)