Los Grizzlies pasaron por el Barclays Center como un ciclón. Los de Tennessee dejaron claro que su gran momento no es flor de un día y sumaron su quinto triunfo seguido apabullando a unos Nets que están viviendo quizás su peor racha de la campaña, y es que nunca antes habían caído en tres encuentros consecutivos.
Como suele ser habitual, Ja Morant tomó el mando de las operaciones. El base de Memphis estuvo excelso con 36 puntos, 6 rebotes y 8 asistencias en una noche en la que Memphis dominó el marcador desde el primer minuto al último. Brooklyn no tuvo opción de pelear por la victoria. A falta de 10 minutos los visitantes vencían por 28 puntos… Game over.
«Desde que llegué aquí, he estado diciendo que merecemos más respeto. Las cosas que estamos haciendo ahora, obviamente, harán que ese reconocimiento y todo lo demás llegue», explica Morant.
Morant contó con la excelente colaboración de Desmond Bane, quien sumó hasta 29 puntos y 8 rebotes. Pese a ello, el escolta centró los elogios en su compañero, a quien ve sin duda en la élite de la NBA. «La gente debatirá si debería o no ser un All-Star. Yo creo que deberíamos estar debatiendo si es o no el mejor base de la liga», sentencia.
Brooklyn, con problemas
Las cosas no están funcionando en los Nets. Tras ocupar durante mucho tiempo la primera posición de la Conferencia Este, en estos momentos son segundos a dos partidos de Chicago. Han perdido tres partidos consecutivos, lo cual sorprende, pero más lo hace el que todos ellos hayan sido en casa. Kevin Durant, quien logró 26 puntos, entiende que les está faltando algo de actitud.
«Se trata de llegar a los juegos con un sentido de urgencia en ambos lados de la cancha. Tenemos que hacer las jugadas correctas tanto en ataque como en defensa».
Tras Durantula el máximo anotador de los neoyorquinos fue James Harden con 19 puntos a los que añadió 8 asistencias. También estuvieron en dobles figuras de anotación Nic Claxton (11), Blake Griffin (10) y Bruce Brown (10).
(Fotografía de Elsa/Getty Images)