Tras dejar con el susto en el cuerpo a todos los aficionados de los Grizzlies hace unos días, las últimas novedades con respecto a Ja Morant parecen mucho más tranquilizadoras. El jugador abandonó cojeando el duelo amistoso ante los Mavericks e hizo temer lo peor a los aficionados de Tennessee tras una temporada marcada por las lesiones, pero, por suerte, parece que no se trata de una dolencia de gravedad.
La franquicia ha diagnosticado al jugador con un esguince leve de tobillo, lo cual no le tendrá demasiado tiempo apartado de las pistas. Pese a que irán con cuidado y es posible que no dispute ninguno de los partidos de preparación que Memphis tiene por delante, todo apunta que podrá estar listo para el 23 de octubre, día en que el equipo arranca la liga regular midiéndose a los Utah Jazz.
Morant viene de disputar solo nueve encuentros durante la temporada 23-24, pues, tras cumplir su sanción de 25 partidos, sufrió una lesión en el hombro que le hizo perderse lo que quedaba de curso. Esto puso el colofón a un año lleno de problemas para los Grizzlies en este aspecto, problemas que esperan dejar atrás esta vez para regresar a lo alto de la conferencia. Y haber esquivado una bala con estos problemas de Ja es desde luego un alivio.
(Fotografía de portada: Ron Jenkins/Getty Images)
