Indiana fue destrozado por los Knicks en el quinto partido de la serie. Si el marcador fue duro (121-91), no menos lo fue el hecho de ver como les pasaban por encima en la faceta reboteadora; tanto es así que los de la Gran Manzana capturaron 20 rebotes en ataque por sólo 5 de los Pacers. Fue una diferencia enorme, una que unida a las pérdidas de balón hizo que los neoyorquinos lanzaran hasta 29 veces más a canasta. Sí, el dominio fue absoluto y tras la explicación del mismo por parte de Rick Carlisle, ahora ha tocado escuchar a Myles Turner, quien lo vivió desde el parqué.
«Sé que no hice mi trabajo y necesito personalizar ese problema de cara al próximo partido. Asumo toda la responsabilidad. Sé que muchas cosas de las que hacemos comienzan con mi comportamiento ahí abajo», comenta en declaraciones recogidas por Indy Star.
Lo cierto es que tanto a Turner como a sus compañeros les faltó agresividad. El pívot sólo fue capaz de coger 5 rebotes en 30 minutos, pero tampoco es que ninguno de sus compañeros diese un paso al frente; es más, el propio Tyrese Haliburton admite que también estuvo lejos de lo que debe ser su baloncesto en la postemporada. «Tengo que hacer mi trabajo siendo más agresivo», admite.
Tras el varapalo del Game 5, los Pacers esperan convertir toda esa frustración en energía para levantarse en casa y ser capaces de forzar el séptimo partido en el Madison Square Garden.
(Fotografía de Sarah Stier/Getty Images)