Recular es de sabios, y aquí la NBA ha recogido el testigo y vuelto sobre sus propios pasos para enmendar una regla que se había distorsionado y forzado hasta rozar lo grotesco. Pues no había nada de ortodoxo en ese «jump shot» que hiciese creer que detrás existía una intención «real» de tiro, y por lo tanto el reglamento dejará de señalarla como infracción del defensor a partir de este mismo curso, ya viendo sus primeros ejemplos de ello en la preseason.
No son pocos los jugadores acostumbrados a sacar petróleo de esta acción los que deberán cambiar el chip, y seguro que más de uno cede al viejo impulso durante la temporada y se sorprenda cuando no escuche el eco del silbato. Pero eso se acabó.
Así pues, la historia será de este modo a partir de ahora: si un defensor salta a puntear un lanzamiento pero en su caída no invade la zona natural del lanzador (esto es, su influjo de elevación vertical), no habrá lugar a la falta, por más que el atacante salte hacia adelante en una ejecución completamente antinatural y donde solo se deduzca, efectivamente, que busca generar el contacto con el defensor.
O como indica la nueva norma en su tenor literal y a tres niveles:
- «Shooter launches/leans into defender at abnormal angle» (El tirador se lanza se inclina hacia el defensor en un ángulo anormal)
- «Shooter kicks leg at abnormal angle» (El tirador saca la pierna en un ángulo anormal)
- «Offensive player abruptly veers off path (sideways/ backwards) into defend» (El jugador ofensivo se desvía abruptamente del camino (hacia los lados/hacia atrás) en pos del defensor)
NOT THIS YEAR. goodbye jumping into the defender fouls. pic.twitter.com/FW47gdk0rl
— Rob Perez (@WorldWideWob) October 5, 2021
Lo siento por sus afiliados VIP (todos sabemos bien quiénes son); este tren ya ha partido. Una hebilla menos en el cinturón de las defensas. Ya tocaba. Que el pantalón empezaba a apretar.
(Fotografía de portada Steph Chambers/Getty Images)