Los New Orleans Pelicans no terminan de enderezar la temporada. Cuando no es una cosa, es otra.
Durante la noche del martes superaron a Minnesota Timberwolves por 114–99, pero el triunfo salió bastante caro. Los de Alvin Gentry tendrán que encontrar fórmulas para sustituir a Eric Gordon, quien se rompió un dedo en su mano derecha, la que utiliza para lanzar.
El partido
Los Timberwolves iniciaron el encuentro dominando ampliamente y llegaron a disfrutar de 16 puntos de ventaja en el segundo cuarto, algo que el conjunto local no enderezó hasta comenzada la segunda mitad.
“No podemos esperar a estar abajo en el marcador para jugar con desesperación”, dijo Anthony Davis, el mejor de su equipo con 35 puntos y 7 rebotes. Jrue Holiday aportó 19 puntos y Dante Cunninghman 11 tantos.
Por Minnesota el máximo anotador fue Andrew Wiggins con 21 puntos, seguido por Karl-Anthony Towns con 20 puntos y 13 rebotes y Ricky Rubio con 15 puntos.
La lesión de Gordon
Gordon se rompió el dedo corazón de su mano derecha y no está claro cuanto tiempo se perderá. El escolta promedia 15 puntos y 2,7 asistencias esta temporada. Anoche le dio tiempo a anotar 11 puntos antes de tener que retirarse.
“Aporta mucho”, reconoció Davis, quien también añadió que “está tirando bien” y “será duro estar sin él”.
Pésima racha
Los Timberwolves (13–30) siguen hundiéndose en la tabla —ya solo Los Angeles Lakers tienen peor récord— y han perdido 10 de sus últimos 11 partidos y en los próximos cuatro compromisos se enfrentarán a Dallas, Memphis, Cleveland y Oklahoma City.