Se puede hablar más alto, pero no más claro. Kristaps Porzingis terminó el Game 2 de las Finales ante Dallas Mavericks con molestias físicas. A poco más de cuatro minutos para la finalización del choque se quejó de un problema en su pierna derecha y dejó la cancha en favor de Al Horford. Fue un momento de tensión, ya que fue en el primer choque contra los de Texas cuando regresó de una ausencia de cinco semanas por una lesión muscular en la misma pierna. Pues bien, parece que no hay opción alguna de que se pierda el tercer partido, el cual tendrá lugar en la cancha de los Mavs.
«No se trata de nada complicado. Moriré ahí fuera si es necesario, así que se trata sólo de seguir adelante. Obviamente estaba un poco limitado, así que lo inteligente fue sacar de nuevo a Al Horford y cerrar el partido con él», comenta a los medios.
Estando ya en el banquillo, Porzingis utilizó una banda para estirar la pierna derecha y posteriormente se le vio marcharse a vestuarios sin aparente cojera. El letón reiteró que estará listo para el siguiente encuentro, si bien admitió que le realizarán algunas pruebas este lunes para confirmar que no hay mayor problema.
«Me siento bien. Obviamente algo ocurrió, pero fue leve y tengo un par de días para prepararme nuevamente, y créanme, haremos todo lo posible para estar de nuevo en la batalla», sentencia tras cerrar el Game 2 con 12 puntos, 4 rebotes y 2 tapones en 23 minutos de juego.
Mazzulla lo confirma
Por si escucharlo por parte del protagonista no fuese suficiente, en la rueda de prensa posterior al partido se le preguntó a Joe Mazzulla por si tenía algún tipo de preocupación respecto a que se hubiese producido una recaída de Porzingis. Su respuesta fue tan escueta como clarividente. «Cero. Se encuentra bien».
(Fotografía de Maddie Meyer/Getty Images)