Shaedon Sharpe no necesitará pasar por el quirófano. La lesión en el hombro izquierdo que el novato sufrió en su debut en la Summer League no requerirá de cirugía para ser solventada, de modo que el de los Blazers podrá continuar su rehabilitación con normalidad y, salvo sorpresa, estará listo para unirse al equipo cuando arranque el training camp.
Sharpe fue elegido por Portland en la séptima posición del pasado draft, una elección de cierto riesgo dado que, pese a su gran potencial, el escolta no jugó ni un solo minuto en NCAA. Llega por tanto a la liga como una gran incógnita, situación agravada por el hecho de no haber podido disputar ni siquiera 6 minutos en Las Vegas, lo que hará que sea necesario esperar al inicio de la pretemporada para poder verle realmente en acción. Hasta entonces, él seguirá recuperando su hombro y preparándose para tratar de demostrar que la confianza de los Blazers en él estaba justificada.
(Fotografía de portada: Sarah Stier/Getty Images)