Con el Media Day de casi todas las franquicias ya en marcha, toda gran figura de la liga tendrá que contestar cuestiones sobre los abruptos sucesos de las últimas semanas. Stephen Curry no iba a ser menos, y preguntado por Robert Sarver y todo lo derivado de su suspensión, la estrella de los Warriors admite haber charlado con Adam Silver del asunto. «Escuché su punto de vista y los mecanismos que tenía para intervenir en un asunto que concierne a la integridad de todos en esta liga» contesta con seriedad. No especifica cual fue su respuesta al comisionado, pero probablemente se pareciese a lo expuesto hoy en rueda de prensa. «Debería existir un estándar sobre lo que es tolerable y lo que no».
Una mezcla entre la suspensión, la presión social y la económica provocó que finalmente Sarver se decidiera a iniciar una venta que ya está en marcha. Lo cual implica que en algún punto de los próximos meses Phoenix Suns y Mercury tendrán nuevos propietarios. La venta se está tasando hasta en 2.500 millones de dólares de los cuales el máximo accionista recibiría alrededor de un tercio. Una vez se haga efectiva la compra, el nuevo propietario puede obligar al resto de dueños minoritarios actuales a vender su parte o permitir que la mantengan. «Creo que es lo que debería haber pasado desde un principio» continúa tajante Curry.
«Honestamente, estoy contento de de llegar a un punto en el que el equipo se venda tarde o temprano» celebra Curry después de criticar las medias tintas del primer castigo. De esta forma la postura del jugador de los Warriors se suma a la expuesta días atrás por LeBron, Chris Paul o McCollum. A las que seguro se unirán varias de las caras más reconocibles de la liga en las siguientes jornadas.
(Fotografía de portada de Jed Jacobsohn-Pool/Getty Images)