La temporada 18/19 acabó para LeBron James el pasado viernes. Así lo anunciaron Los Angeles Lakers, que hicieron oficial que el alero no participaría en ninguno de los encuentro que les restan de aquí a final de temporada, una decisión que, tal y como ha asegurado Luke Walton, no fue fácil de tomar para el jugador.
«Él quiere jugar» afirmó el técnico. «Pero el equipo médico me dijo que no valía la pena y que lo mejor era asegurarse de que estuviese sano durante todo el verano, así que decidimos dejarlo al margen durante los últimos partidos».
Esta decisión parece la más normal dado que los angelinos ya no se juegan nada salvo una buena posición en el Draft. De hecho, Walton no tardó en ser preguntado acerca de por qué no habían decidido apartar a LeBron desde el momento en que quedaron matemáticamente fuera de los playoffs.
«Todo se resume en que él quiere competir» dijo. «Quería estar con sus compañeros aunque no hubiese nada en juego, pero con el paso de los días se hizo más fácil decirle que era mejor priorizar su estado físico. Estará en la sala de pesas haciendo ejercicio y cuidándose lo máximo posible».
Victoria en Nueva Orleans
Pese a la ausencia de LeBron, los Lakers sumaron anoche su victoria número 35 de la temporada tras derrotar a los Pelicans por 102-130. Fue un duelo marcado por las numerosas ausencias de ambos equipos, lo que permitió brillar a hombres de segunda fila como Rajon Rondo, autor de 24 puntos y 12 asistencias, o JaVale McGee, que terminó con 23 tantos y 12 rebotes. También destacó Alex Caruso, que estableció su récord anotador tras convertir 23 puntos.
Con este triunfo, los angelinos han ganado cuatro de sus últimos cinco partidos, algo que no hacían desde el mes de diciembre.
(Fotografía de portada: Harry How/Getty Images)