El general manager del equipo, Tommy Sheppard, asegura que quieren mostrarle que van en la dirección correcta
Las cartas están sobre la mesa. Tras meses en los que ha habido informes asegurando que Washington Wizards estaba tan dispuesto a traspasar a Bradley Beal como a renovarlo por el máximo, ha sido la franquicia capitolina la que nos ha hecho salir de sudar al certificar que ofrecerán la extensión máxima al escolta; es decir, tres años y 111 millones de dólares.
Según ha confirmado Tommy Sheppard, recientemente nombrado general manager permanente del equipo, Washington pondrá la oferta ante los ojos de Beal este viernes, primer día en el que es apto para firmarla. «Lo haremos en el primer momento permitido. Vamos a ofrecer a Bradley la extensión máxima», comenta en declaraciones recogidas por ESPN.
La intención de la franquicia está meridianamente clara, pero la del jugador no tanto. Nada más concluir la temporada Beal mostró dudas sobre su continuidad en Washington, ya que no tenía claro que se estuviese trabajando en los despachos del modo correcto. Ahora, con la certeza de que desean renovarlo, sigue sin ver claro seguir, tal y como expresa su agente, Mark Bartlestein.
«Hay momentos en una carrera en los que hay que tomar grandes decisiones. Brad lo estudiará todo y decidirá qué hacer. No hay más que buenas palabras y agradecimientos para Ted Leonsis (propietario), Tommy y Scott Brooks. Han tratado a Brad maravillosamente», destaca respecto a una decisión que tiene fecha límite, ya que el 21 de octubre es el último día en el que podría firmar la mencionada extensión.
En cualquier caso, los Wizards no se cierran en banda. Sabedores de que la extensión no entraría en vigor hasta la campaña 2021-22, o lo que es lo mismo, aún tienen asegurada la presencia de Beal por dos años más; la gerencia estaría dispuesta a que la renovación quedase enmarcada para únicamente uno o dos años. Con este movimiento ganarían tiempo para mostrar a su estrella que se está trabajando en la línea correcta, y a su vez encontrarían una estabilidad que entienden necesaria.
«Le quedan dos años de contrato, es de Missouri y vamos a tener que demostrarle que estamos en el camino. Necesitamos mostrarle que estamos muy cerca de construir de la manera correcta y que no vamos a traer a nadie con un carácter que no concuerde. Vamos a rodearlo de personas con las que quiera jugar», sentencia.
¿Y si dice ‘no’?
Pues se abrirían varios escenarios. Según Sheppard el hecho de que firmase ya una extensión supondría el compromiso del equipo de no negociar por él en las dos campañas que le restan del actual contrato. Si se da el caso contrario es muy probable que se le quisiera dar salida. Pero no es tan sencillo, ya que podrían estar ante un una decisión intermedia. Si Beal se colase en uno de los mejores quintetos de la próxima temporada podría firmar una extensión en verano de 2020 de cinco años y 254 millones de dólares; sí, el súper máximo. En caso de no conseguirlo se quedaría en cuatro años y 155 millones de dólares. Entonces, ¿le merece la pena firmar ya? No lo parece.
Lo que sin duda no despierta incógnita alguna es su nivel sobre la pista. La campaña pasada el shooting guard se fue hasta los 25,6 puntos, 5,5 rebotes y 5 asistencias. En lo que respecta a sus aventuras en playoffs (exactamente cuatro), promedia 22,7 puntos en 40 partidos. Pretendientes no le van a faltar.
(Fotografía de Maddie Meyer/Getty Images)