Fue un bajón ver a Zion Williamson nada más que 15 minutos en el partido inaugural ante Utah. Sin embargo, ese es el plan que los New Orleans Pelicans van a seguir con el novato formado en Duke. De hecho, David Griffin, vicepresidente de operaciones y hombre al mando en la directiva de la franquicia, aseguró este viernes que la restricción de minutos en pista va a continuar en próximas citas.
«Teníamos un plan muy concreto para cada miembro del equipo. Todos los jugadores tenían que someterse a ese plan. El plan incluía minutos en los partidos amistosos. Muchos jugadores jugarían unos 12, 15 minutos o lo que fuera. Era todo parte de un enfoque para poder jugar (en la temporada regular)», declaraba Griffin este viernes.
Zion no pudo formar parte de ese croquis inicial puesto que al poco de entrar en la burbuja NBA, se vio obligado a abandonar el resort por causas familiares de fuerza mayor. Estuvo fuera casi dos semanas y fue entonces cuando se vino abajo todo el proyecto físico y de gestión de esfuerzos que habían preparado para Williamson.
«Todo el mundo tenía que seguir esos pasos. Zion no tuvo esa oportunidad. Y, desafortunadamente, por el asunto de su familia, él tuvo que irse y fue una razón legítima para irse. Pero desafortunadamente, ha estado trece días fuera del equipo sin seguir ese plan después de estar sin jugar durante cuatro meses. Valoro que todo el mundo quisiera que jugara 40 minutos anoche pero no iba a hacerlo. No se cometieron errores en cómo manejamos esto. No es complicado. No jugará muchos minutos en el próximo partido y puede que tampoco en los siguientes», zanjaba David Griffin.
Alvin Gentry, entrenador jefe de los Pelicans, había sido criticado por no poner a Zion en cancha más tiempo. Sobre todo, por no llamarle a filas durante el tramo decisivo del encuentro. Sin embargo, la decisión no fue voluntad del preparador, sino de toda la organización en su infatigable labor de gestionar los esfuerzos de Williamson para que el cuerpo no rompa por algún lugar. Recordemos que el novato no supera los dos metros de altura y ha llegado a pesar 130 kilos. Envoltorio portentoso pero que puede volverse en contra propia a la mínima grieta.
Por todo ello, Zion Williamson seguirá con restricción de minutos. Al menos en el próximo partido de los Pelicans (Clippers). A partir de ahí, ya veremos.
(Fotografía de portada: Tom Pennington/Getty Images)