El número 1 del último draft ha firmado el mejor porcentaje en tiros de campo de un jugador en sus dos primeros partidos en la Liga
Cuando lo más fácil era que las expectativas superasen a Zion Williamson, este se ha rebelado como lo que es, un jugador llamado a marcar una época. Su primer partido en la NBA dejó a no pocos con la boca abierto, pero claro, podía tratarse de un espejismo, de un hecho aislado… Pues va a ser que no. Anoche, ante Denver volvió a realizar una actuación que no hace sino acrecentar el deseo de que llegue su próximo encuentro cuanto antes.
Frente a los Nuggets el número 1 del Draft se marchó hasta los 15 puntos, 6 rebotes, 1 robo y 1 tapón en 21 minutos de juego. Su gran desempeño no evitó que New Orleans cayera ante los de Colorado para sumar su segunda derrota desde su debut, pero verle a tal nivel es ya motivo de celebración tras tres meses de ausencia por una cirugía artroscópica en su rodilla derecha.
Zion está jugando mejor que bien. Con 37 puntos y 13 rebotes acumulados en dos primeros partidos en la NBA, solo dos números 1 del draft le superan en los 30 últimos años. Por un lado tenemos a LeBron James, quien hizo 46 puntos y 18 rebotes. Por otro a Karl-Anthony Towns, que alcanzó los 42 puntos y 26 rebotes. Williamson está en la élite. Y hay más. Con un 15 de 20 en tiros de campo; es decir, un 75%, el rookie de los Pelicans tiene el mejor porcentaje para un jugador en sus dos primeros partidos desde que se puso en funcionamiento el reloj de posesión (temporada 1954-55).
Y aún tienen que soltarle la correa. Con la precaución por bandera, en New Orleans están llevando una meticulosa restricción de minutos para evitar cualquier percance que complique su participación tanto en el presente como en la próxima campaña. Zion por su parte asegura encontrarse realmente bien. «Estoy mucho mejor a pesar de que solo había jugado un partido hasta hoy. Siento que estoy recuperando la química con mis compañeros y creo que jugué bien». Juzguen ustedes.
El público pide más
Los Pelicans no piensan salirse ni un milímetro del plan marcado. En el debut de Zion lo cambiaron cuando había sido el artífice de la remontada con cuatro triples en tres minutos. Anoche, a falta de 6:52 minutos para concluir el choque, repitieron estrategia para mandarlo definitivamente al banquillo. Ante tal escenario los aficionados de la franquicia de Luisiana entonaron ‘queremos a Zion’. No volvió. Cuestionado por ello, Williamson explica que simplemente juega cuando así se lo ordenan. «Realmente no es mi decisión empezar o terminar los cuartos. Solo estoy jugando cuando me necesitan».
La realidad es que los Pelicans son un equipo diferente con él en pista. Del total de 96 minutos que se han jugado desde su debut 39 han sido con Zion y 57 sin él. En los primeros, en los que han contado con su participación, el equipo tiene un +19. Cuando se ha ausentado la marca baja estrepitosamente hasta el -30…
(Fotografía de Sean Gardner/Getty Images)