El tercero en el linaje, que no el último, de los Antetokounmpo. Por detrás aún esperan Francis y Alexis. Pero ahora se acerca el turno de Kostas. A sus 19 años aborda su primer curso de Universidad, y quién sabe si el último. De lo que sí tenemos certeza es de que seguirá la senda de sus dos hermanos mayores: el baloncesto será lo que marque su vida.
Comparaciones odiosas a un lado, su fisionomía se asemeja más a la de Giannis de lo que lo hacía la de Thanasis. Espigado, tremendamente enjuto (88 kilogramos) mientras aguarda su primer affair con las mancuernas y el nutricionista, Kostas alcanza ya los 6,10 pies (2,08 metros) y con las alas extendidas marca 7,2 de envergadura. Giannis, uno de los albatros de la Liga, detiene el metro en los 7,3.
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Va con un año de retraso. Su falta de ahínco en los estudios desembocaron en un examen parcial negativo y en que, como consecuencia, fuese declarado como no elegible para la NCAA. Hoy ya es parte de la aventura universitaria, como alumno de Dayton (Ohio) y militando en las filas de su equipo de baloncesto, los Flyers.
Kostas ha aprendido desde bien joven a lidiar con el papel de promesa. A los 16 años ya hacía dobles-dobles de puntos y tapones. Cumplió con su papel de estrella en los Knights, su equipo del instituto. En verano de 2016 se presentaba a nivel internacional, disputando el Europeo Sub-20 con Grecia. De banderilla en banderilla en su eslalon imparable hasta la meta: la NBA.
Destellos que recuerdan…
Por ahora, con solo cuatro partidos disputados, su técnico en los Payton se lo toma con calma, sin apresurarse en cargar de responsabilidad a un jugador cuyo apellido ya es fardo suficiente.15 minutos por partido en los que Kosta, alero por predilección, promedia 4,8 puntos y 1,8 tapones.
Sin ninguna certeza todavía en sus intenciones, los rumores indican que no se precipitará en presentarse al Draft, siendo lo más probable que apueste por un segundo año en la Universidad para desarrollar unas cualidades tan infinitas como, a día de hoy, color verde pasto.
En la web especializada nbadraftroom.com destacan entre sus mayores cualidades un gran manejo de balón para su altura, facilidad inusitada para un eurostep de zancada lunar —¿os suena?— y un poder de estampida en el contraataque letal.
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A mejorar: su tiro de tres, muy mustio a día de hoy, y una visión de juego que todavía tiene mucho que envidiar a la de su hermano candidato a MVP en la mejor liga del mundo.
Por su agilidad lateral y su potencial defensivo, en los prospects más audaces ya le comparan con un Perry Jones III en el peor de los casos. ¿Su techo? Incalculable. Nosotros, por nuestra parte, preferimos observar y esperar.