Westbrook se deshace de un fan que celebra el triunfo en su cara

Normal que tras claudicar en el último instante tras una remontada de veinte puntos y habiendo visto como segundos antes tu compañero, Paul George, anotaba un triple antológico para empatar el partido, lo último que te apetezca aguantar sea ver como un aficionado rival celebra el triunfo en tus mismas narices.

Eso le pasó anoche a Russell Westbrook en el choque ante los Nuggets, quien de repente se vio delante a una especie de Cristiano Ronaldo -con gorra, gafas y peleado con el gimnasio- en la celebración de un gol. Le salió de dentro, y se deshizo de él con un empujón al tiempo que buscaba con su mirada a los árbitros como cuestionándose si un aficionado, por más que abone sus buenos cientos de dólares por un asiento de primera fila, tenía derecho a hacer eso.

Obviamente no. Al igual que tampoco nos sorprendería nada que la Liga, inflexible últimamente, sancionara de algún modo a Westbrook por esta pequeña reacción que hubiese tenido casi cualquiera con sangre en las venas. Preguntado por ESPN, ya en frío, sobre si cree que actuó correctamente, el jugador se reafirma.

«Desde luego. Tienes que ser capaz de proteger a los jugadores. Los aficionados tienen derecho a disfrutar del partido, pero que se adentren en la pista es inaceptable». Lo cierto es que ningún miembro de seguridad intervino para evitar que el fan irrumpiera en la cancha ni tampoco para apartarlo, dejando a West solo ante el peligro.

Tercer episodio

No es el primer rifirrafe que tiene el playmaker de OKC con un aficionado. En octubre de 2016, West tenía que aguantar también como un seguidor de los 76ers le hacía dos descaradas peinetas (aderezadas por un f*** you) desde su asiento. Ahí, el base, más estupefacto que molesto, no se tomó la justicia por su mano y se lo comunicó inmediatamente a los árbitros, quienes informaron e inmediatamente desalojaron al aficionado del pabellón.

Tampoco el segundo. Unos meses antes de aquello, en los playoffs de 2016, Westbrook sí descargaba su furia momentánea con los árbitros en un aficionado de Dallas con un claro Shut de f*** up! que le costó una multa de 25.000 dólares.


EXTRA NBAMANIACS

Nuestro trabajo en nbamaniacs es apoyado por lectores como tú. Conviértete en suscriptor para acceder a beneficios exclusivos: artículos especiales, newsletter, podcast, toda la web sin publicidad y una COMUNIDAD exclusiva en Discord para redactores y suscriptores.