Los Cleveland Cavaliers (116-123) volvieron a tomarse la revancha en una batalla épica en el TD Garden de los Boston Celtics. El encuentro supone empatar a dos el cuadro de enfrentamientos entre ambos conjuntos en la liga regular. Solo los playoffs pueden dirimir quién es el rey del Este, aunque en lo puramente clasificatorio, Cleveland tiene casi embolsada esa primera plaza.
Lo lograron los Cavs con un Donovan Mitchell inconmensurable (41 puntos, 50% en tiros de campo) que guió una nueva remontada. Esta vez de 22 puntos conseguida desde el primer cuarto por los Celtics. Fueron baja Jrue Holiday y Kristaps Porzingis, lo cual se terminó notando.
Otra remontada
No es la primera vez que Cleveland tiene que remontar un resultado adverso contra los Boston Celtics. Incluso para acabar muriendo en la orilla, los Cavs han acostumbrado a partir por detrás en el marcador y apretar tras el descanso. Hoy tuvieron varios conatos, pero la reacción final no llegó hasta entrado el tercer cuarto.
Tatum y los Celtics en modo apisonadora
¿Qué se puede hacer cuando Jayson Tatum inicia el primer periodo enchufando 18 puntos con un 67% de acierto en el tiro, 50% en el triple y visitando 5 veces la personal? Exacto: muy poco. El alero cumplió con el guión de partido que hablaba de la dominancia física de los Celtics en la línea exterior. Castigando desde fuera y llevando a Max Strus y compañía hacia dentro, donde su tamaño se impone.
Jayson Tatum's first half was one for the history books 📕
— NBA (@NBA) March 1, 2025
30 PTS | 9 REB | 7 AST
That's the first time in the play-by-play era (1997-98) that those numbers have been reached in ANY half 🤯 pic.twitter.com/BFZ4R4eCIr
Sentó el tono del partido sobre todo a partir del rebote, categoría en la que sumó siete solo en el primer cuarto. Jaylen Brown sumó también 11 puntos queriendo demostrarle a Evan Mobley que podrá defender lejos del aro, pero no a cualquiera. Boston pasó por encima de los Cavaliers en todos los aspectos del juego e inició con un parcial de 25-3. Demoledor.
El banquillo al rescate
Cuando se habla de los Cavaliers sale mencionar a sus cuatro fantásticos. Pero lo cierto es que este equipo le debe mucho a la aportación del banquillo. Fue esa mezcla entre titulares y suplentes que tanto le gusta a Kenny Atkinson la que comenzó a pulsar las teclas correctas.
Con Mobley y Mitchell en cancha acompañados por De’Andre Hunter, Dean Wade e Isaac Okoro (tiro y tamaño), los Cavaliers lograron acercarse a dos puntos de Boston. Ty Jerome también tuvo su momento de lucidez, com o habitúa. No llegaron a ponerse por delante y, a la vuelta de los titulares, los verdes pisaron de nuevo el acelerador para volver a los dos dígitos de ventaja. Tatum acabó la primera mitad con 30 tantos.
Avalancha final
El partido no tenía la pinta de estar dominado de cabo a rabo por los Celtics una vez llegado el descanso. Sobre todo porque los Cavaliers estaban volviendo a meter los triples a un ritmo similar al de los Celtics. Fue eso lo primero que se cayó en Boston.
Los de Atkinson empezaron a cambiar en todos los bloqueos de forma agresiva y a defender en uno contra uno constante para no permitir triples de más. Dejaron a Boston en solo trece tiros exteriores en la segunda parte, de los que metieron tres. Cuando quisieron darse cuenta de la sequía, Mitchell ya había tomado el partido por las solapas.
Como fue en la primera victoria de Cleveland ante Boston esta temporada, el escolta dio un puñetazo sobre la mesa que se escuchó también en Oklahoma. Este año Mitchell ha descendido en porcentaje de uso, tiros y puntos por encuentro. ¿Pero acaso el mundo olvida lo que es la versión de este jugador en pretemporada? Por si acaso, hoy, en el escenario más exigente, se encargó de recordarlo.
Donovan Mitchell brought his best to Boston in the Cavs' 9th straight win!
— NBA (@NBA) March 1, 2025
🕷️ 41 PTS (26 in 2H)
🕷️ 5 AST
🕷️ 5 3PM
Superstar performance on the biggest stage. pic.twitter.com/wu8lL5zi67
Anotó 26 de sus 41 puntos en la segunda mitad y 12 en el último cuarto. Lo hizo de todos los colores. Comiéndose el aro con mates y penetraciones antológicas, tres triples tras bote de siete intentos y su deliciosa anotación de zonas intermedias. En frente Tatum y Brown seguían haciendo barbaridades, pero Cleveland logró reducir a Boston a ‘solo’ eso, mientras los Cavaliers eran cada vez más un arrebato coral.
El partido se remontó en defensa, pero es más fácil decir cosas como esta cuando se cuenta con un talento como Spida.
Jugadores destacados
No podían ser otros.
Donovan Mitchell
Que le gustan los escenarios grandes al chico. Hoy tocó el Mitchell del hero ball que produce desde el uno contra uno y pide cada balón que no está en sus manos, aunque acabó dejando espacio para Mobley y Darius Garland (20 puntos, 39% en el tiro). Era lo que pedía el contexto del partido una vez se empezó con tan mala pata.
Jayson Tatum
Superlativo en todo, muchos le achacarán ‘esconderse’ en el último cuarto detrás de Brown. Lo cierto es que el equipo fluyó al ritmo de su estrella durante todo el partido y que fueron otros aspectos lejos de lo individual lo que se acabó resquebrajando. ¿A qué otros jugadores se le afean actuaciones de 46 puntos, 16 rebotes y 9 asistencias?
Jaylen Brown
El Robin que más veces se convierte en Batman. Seguramente sea cosa de una noche, pero es un mérito enorme que Cleveland lograse reducir a los Cletics a su pareja estrella. Solo Derrick White, que en realidad es un tercera espada mayúsculo, aportó en los números brutos. Joe Mazzulla apenas confió en su banquillo y aun así salió ‘trasquilado’. No será por JB, que se echa a la espalda todo excedente para marcarse 37 puntos con 54% en el tiro y 67% de triples.
Estadísticas del partido
Estas son las estadísticas de equipo más relevantes.
Equipo | Puntos concedidos tras pérdida | Triples | Tiros libres | Rebotes | Máxima renta |
---|---|---|---|---|---|
Boston Celtics | 14 | 17/39 | 13/17 | 40 | 22 |
Cleveland Cavaliers | 15 | 17/39 | 16/19 | 44 | 7 |
Mandíbula de hierro
«Nos han dado un puñetazo en la cara. ¿Qué vamos a hacer? ¿Cómo responderemos?», cuenta Mitchell que se preguntó tras ese primer parcial. El resto es historia. «Ojalá volvamos aquí en verano y juguemos siete partidos», añadió Garland.
(Fotografía de portada: Winslow Townson-Imagn Images)