Markieff Morris siente que su actual franquicia, los Suns, le ha faltado el respeto.
Tanto por haber traspasado a su hermano Marcus –a los Pistons–, como por haberle incluido a él en alguna que otra conversación de traspaso –parece que a Portland en un sign and trade con LaMarcus Aldridge–. Por eso, no parará hasta que no tenga que vestir la camiseta de Phoenix nunca más, publica este viernes el portal Arizonasports.com.
Al parecer, el ala-pívot ya hasta tendría sus preferencias dentro de los equipos a los que querría ir: Houston Rockets le gusta por James Harden, y los Toronto Raptors por su relación con Kyle Lowry. Sin embargo, su intención pasa por jugar en cualquier otro sitio –sin demasiado favoritismo– antes que en los Suns.
No traspaso
Así, Morris hará todo lo posible para ser traspasado. Actitud que puede chocar a toda velocidad y de frente con la de su actual entidad, ya que los Suns no tienen, de momento, demasiada intención de empezar a hablar de traspasos en su nombre.
No solo eso, sino que Morris es el ala-pívot titular de Jeff Hornacek y uno de los jugadores más importantes de los Suns. Habrá que ver cómo casa dicho rol con su actitud de no querer ni pisar de nuevo las instalaciones de Arizona.
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