Joakim Noah ha sido durante muchos años el alma de los Chicago Bulls, un equipo que bajo la dirección de Tom Thibodeau, y sin contar durante mucho tiempo con Derrick Rose, hizo de la entrega y el esfuerzo hasta la extenuación su bandera.
Poco queda de ese equipo. Thibs fue despedido, llegó Fred Hoiberg y la filosofía sobre la pista cambió radicalmente haciendo que el papel del pívot francés se viese igualmente limitado; tanto es así que el propio jugador no escondió su descontento.
Con esos ingredientes, y aún viendo que el rendimiento de Noah ha ido bajando a la vez que las lesiones se iban cebando, los de Illinois no quieren que este sea su final en la franquicia, por lo que planean volver a firmarle a partir del 1 de julio, cuando sea oficialmente agente libre sin restricciones.
Según informa Chicago Tribune, la decisión del equipo, apoyada por palabras del vicepresidente de los Bulls, John Paxson, se basa en que siguen pensando que Noah reúne gran parte de los valores en los que creen, por lo que mantenerle en el roster es el objetivo.
El frío dato
Más allá de temas de lealtad o filosofías de equipo, la realidad estadística muestra a un jugador cuyos números –problemas físicos mediante– han ido en línea descendente. Así, en la temporada 2013-14 firmó 12,6 puntos, 11,3 rebotes y 5,4 asistencias en 35,3 minutos por partido, en el presente curso se ha quedado en 4,3 puntos, 8,8 rebotes y 3,8 asistencias en 21,9 minutos por noche pudiendo jugar sólo 29 partidos.
En plena recuperación
Noah, obligado a pasar por el quirófano en enero por problemas en su hombro izquierdo, aún se encuentra trabajando para recuperarse de dicha cirugía. En todo caso, los plazos apuntan a que estará en perfectas condiciones para iniciar el curso 2016-17.