Desde Sacramento Kings, sobre todo por voz de Vlade Divac, se ha reiterado por activa y por pasiva que la intención del equipo no es que esté lejos de traspasar a DeMarcus Cousins, sino que ni siquiera contemplan atender llamadas para negociar por él. Pues bien, esa postura inflexible puede cambiar con la llegada del verano.
Según señala David Aldridge de NBA.com, la franquicia de la capital de California estudiaría la salida de su jugador franquicia cuando acabase la actual temporada.
Sin entrar a detallar los problemas disciplinarios del pívot, que han sido varios, ni su complicada relación con George Karl, lo cierto es que si nos ceñimos a las estadísticas globales del equipo, hay motivos para pensar que la mejor solución es que jugador y equipo separen sus caminos.
Desde la llegada de Cousins, los Kings han sido incapaces de alcanzar los Playoffs, es más, no han estado ni cerca. Empezando por la campaña 2010-2011, los balances finales han sido: 24-58, 22-44, 28-54, 28-54, 29-53 y 26-41 (en la presente).
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Desconozco qué pasa en estos momentos por la cabeza de los dirigentes de Sacramento, pero sí que puedo intuir que la actual campaña la han tomado como un ‘experimento’ para comprobar si la fórmula Cousins+Karl era factible. Y no lo es.
Con ello, y tras seis años de travesía por el desierto, ha podido llegar el momento de que los Kings intenten algo nuevo, aunque siempre sea difícil desprenderse del que puede ser en estos momentos el mejor pívot de la NBA.