Las últimas semanas han sembrado muchas dudas sobre la continuidad de Damian Lillard en los Portland Trail Blazers, y no son pocos los equipos que buscarán pescar en aguas revueltas. Uno de ellos es Golden State Warriors, que con la vuelta de Kaly Thompson de lesión, tienen intenciones legítimas de volver a la cima de la Conferencia Oeste. Un salto para el que la adquisición de Lillard sería definitiva. Anthony Slater aseguraba en The Athletic que «ellos harían la llamada y ya lo han debatido a nivel interno».
Además, los de San Francisco serían una de las franquicias que más botín podría dar a cambio de la estrella. El mismo artículo subraya que los Warriors estarían dispuestos a mandar sus dos elecciones del draft y a James Wiseman a Oregón a cambio de Dame. Añadiendo a Andrew Wiggins para balancear salarios. La duda está en los planes que tenga Portland de aquí en adelante. Si finalmente la situación con Lillard es insostenible y se ven obligados a traspasarle, será interesante si su pretensión inmediata es reconstruir o competir. En cuyo caso, encontrarán mejores opciones que el núcleo joven que Golden State está dispuesto a ofrecer.
Aún así, los Warriors mantienen inalterada su agresividad en el mercado. La misma que les llevó a pujar con todo por Kevin Duran6t en 2016. Que buscó cualquier resquicio para perseguir a Karl-Anthony Towns y Bradley Beal en mercados más recientes. Que respondió a la lesión de Klay Thompson con el inmediato traspaso de Kelly Oubre Jr. entrando en impuesto de lujo sin dudar. Golden State no va a desperdiciar ni un año del apogeo de Stephen Curry sin intentar ser campeón.
(Fotografía de portada de Ezra Shaw/undefined)