La grave lesión de Jayson Tatum ha trastocado —o quizá simplemente acelerado— el devenir del proyecto y los planes que tiene la gerencia para el equipo. El alero se pasará toda la temporada 2025-26 en blanco tras sufrir un desgarro en el Aquiles, lo que obliga a replantear el enfoque deportivo, al menos, en el corto plazo. Y habrá cambios.
De acuerdo con el periodista de ESPN, Shams Charania, se espera que los Celtics realicen modificaciones significativas en su plantilla de cara al próximo curso. El nuevo grupo propietario no está dispuesto a desembolsar más de 500 millones de dólares entre salarios e impuesto de lujo por un equipo que no garantice luchar por el anillo, así que se optará por aligerar la carga financiera.
Es muy probable que jugadores como Jaylen Brown y Derrick White superen esta criba, con todos los ojos puestos, una vez más, en los contratos de Jrue Holiday y Kristaps Porzingis. Entre los equipos interesados en el base se encontrarían los Dallas Mavericks y los Sacramento Kings, y ahora queda por ver si existen pretendientes para el internacional letón.
La gerencia también tendrá que tomar otra decisión: si emplear estos cambios como una pequeña transición hacia la temporada 2026-27, cuando Tatum esté de regreso, o, si por el contrario, el objetivo máximo volverá a ser competir por el campeonato en 2026.
(Fotografía de portada de Bob DeChiara-Imagn Images)