El mejor pagado de los Warriors podría ser Barnes

Hasta que el Two-peat quede recogido en los epígrafes históricos de la NBA, no existe otra preocupación en la Bahía. Sin embargo, el mercado de este año está al caer y va a ser intenso. Y los propios Warriors tendrán bastante que decir dentro de él.

Para empezar, uno de sus jugadores importantes, Harrison Barnes, estrenará cartel de agente libre restringido. Según informa el portal Sporting News, en las oficinas del vigente campeón están decididos a hacer lo necesario por mantener el bloque, como siempre ha esgrimido su propietario, Joe Lacob. Lo que ocurre, para deterioro del plan californiano, es que no van a faltar precisamente actores de reparto invitados.

Equipos con suficiente margen salarial ya han cogido sitio en la maleza para saltar sobre el alero cuando se abra el mercado, el próximo 1 de julio. Celtics, Lakers, Suns o Mavericks estarían ya interesados en Barnes, pudiendo ampliarse esta lista de pretendientes conforme se vayan cayendo franquicias de la batalla por Kevin Durant.

Y, contando el estatus al alza de Barnes para el próximo mercado libre, puede darse una situación cuanto menos paradójica. De cumplir Lacob su palabra de continuismo y retener a Barnes, el joven alero (24 años) se convertiría en el miembro mejor pagado del personal que se emplea en Oakland.

¿Y el resto?

¿Por qué? Porque los réditos de antiguos cánones contractuales todavía benefician a los Warriors. Stephen Curry tiene una temporada más cobrando 12 millones de dólares; Klay Thompson es ahora mismo (y hasta la temporada 2018-19) el techo salarial del equipo con 17-18 millones. Draymond Green se quedó en una franja de 15-18 millones hasta 2020. Y Andrew Bogut y Andre Iguodala tienen una temporada más en torno a 11 millones.

Eso, unido al aumento estimado del margen salarial hasta 92 millones (con el impuesto de lujo calculado en 111) más el valor de mercado actual de Barnes, podría hacer que si se quedase en la Bahía, fuera el jugador mejor pagado.

No es el mejor activo de los Warriors, pero sí podría disfrutar del contrato más holgado en caso de quedarse, ya que su cartel puede rondar los 20 millones de dólares, con 23 como máximo permitido dado su pedigrí NBA.

Su temporada

El cuarto año como profesional de Barnes ha estado nuevamente condicionado por todo el talento del que está rodeado. Con sus atributos personales rendidos a la causa colectiva, el alero hizo una temporada regular de 11,7 puntos, 4,9 rebotes y 46,6 en tiros de campo.

Tiene talento y potencial para estallar mucho más, pero eso sigue quedando camuflado en el mejor equipo de la NBA actualmente.

En las Finales, su participación en la colecta ha aumentado ligeramente, con más puntos (12,5) y más acierto a canasta. En el decisorio Game 4, fue él quien sostuvo a los Warriors en el primer cuarto cuando los Cavs abrían gas para hacer daño y también arrima el hombro en las ayudas y defensas a LeBron James.

Curry, en 2017

Así pues, sin ser el mejor y contando menos años que cualquiera de sus camaradas importantes de título, Harrison Barnes podría este verano convertirse en el jugador mejor pagado de Golden State. No necesariamente tendría eso que suponer cóctel incendiario alguno en la plantilla, ya que, además de la gran química del vestuario, el contrato de Curry se multiplicará ya (por fin) el verano que viene.

Eso sí, a Golden State tampoco puede írsele demasiado la mano con el talonario con Barnes, ya que el año que viene tocará retener a Curry, Iguodala y Bogut. Ése es, precisamente, uno de los motivos por los que la permanencia del joven alero en la Bahía podría enquistarse.


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