La franquicia de Luisiana podrá utilizar 3,6 millones de dólares para firmar a un jugador que cubra la baja del alero
La NBA ha concedido a New Orleans Pelicans la disabled player exception por Darius Miller, quien tras firmar un contrato de dos años y 14,2 millones de dólares se rompió el tendón de Aquiles el pasado 30 de agosto. Esta excepción, pensada justo para aquellos equipos que pierden a un jugador por larga duración, reportará a los de Luisiana 3,6 millones de dólares que podrán utilizar para buscar un reemplazo para el alero, informa Shams Charania de The Athletic.
Aunque pueda parecer una baja no demasiado relevante para los Pelicans, se trata de un jugador que les aportaba profundidad y seguridad desde el banquillo. La campaña pasada, contando con 25,5 minutos por noche, se marchó hasta los 8,2 puntos, 2,1 asistencias y 1,9 rebotes con un interesante 36.5% desde la línea de tres puntos.
Sabedores de que es prácticamente imposible que regrese esta campaña –las reglas de la NBA no se lo impiden aunque esté concedida la excepción–, ahora le toca trabajar a David Griffin para encontrar un sustituto. Dado el perfil de Miller, es probable que New Orleans trate de contratar a un escolta/alero. Aunque la lista de jugadores disponibles es reducida, nombres como J.R. Smith, Jodie Meeks, Iman Shumpert o Nick Young podrían entrar en la mezcla, siendo J.R. alguien que podría encajar bien dado que estuvo junto a Griffin en Cleveland Cavaliers.
Más rocambolesco sería ver por ejemplo a Carmelo Anthony en New Orleans. El 10 veces All-Star sigue buscando equipo, pero sus ojos parecen estar puestos en unirse a un conjunto con aspiraciones al anillo. En cualquier caso, el hecho de seguir sin equipo a estar alturas podría hacer que se replantease sus preferencias. En Luisiana coincidiría con un talentoso grupo de jóvenes talentos liderado por Lonzo Ball, Brandon Ingram y Zion Williamson (nº 1 del Draft 2019). Quién sabe, quizás sea una buena oportunidad.
(Fotografía de Chris Graythen/Getty Images)