Sigue la construcción de una de las plantillas más interesantes del Oeste. A la espera de saber qué sucede con la fallida renovación de Nenê Hilario y tras adquirir a Chris Paul, los Rockets continúan perfilando piezas. Según informa Shams Charania, para The Vertical, Houston acaba de obtener al veterano P.J. Tucker. Lo ha hecho con un contrato para las cuatro próximas temporadas y un montante total de 32 millones de dólares. La última campaña del acuerdo está parcialmente garantizada.
La influencia de Paul
La amistad que mantienen CP3 y el propio Tucker ha sido decisiva para que este último eligiera Texas como destino, como señala Brian Windhorst, de ESPN. Nada más abrirse la agencia libre este 1 de julio, el exterior se reunió con los Raptors en Philadelphia. Tucker había jugado en Toronto el último tramo de la 2016/17, tras ser traspasado desde los Suns en febrero de 2017. Con la propia franquicia de Canadá fue con la que Tucker debutó en la NBA, en 2006, antes de emprender su aventura europea que le mantuvo fuera de la rueda seis años.
Hasta tal punto fue la influencia de Paul en la llegada a Houston de Tucker que Toronto le ofrecía 33 millones por tres cursos, oferta superior a los 32 millones y cuatro cursos (y el último año sólo parcialmente garantizado), de los Rockets. Sin embargo, el North Carolina tomó el camino de jugar con Paul y James Harden en un quinteto que quedaría conformado con estas dos piezas, más el propio Tucker, Trevor Ariza y Clint Capela.
¿Adiós a Shumpert?
Houston ha estado trabajando en las últimas horas para ver la posibilidad de tener a Iman Shumpert, de Cleveland. No obstante, la llegada de Tucker puede finiquitar esta operación, dentro de unos Rockets que buscaban refuerzo exterior con elementos que pudieran defender bien y comportarse de manera eficiente en ataque, para cubrir las deficiencias atrás de Harden. Tucker parece que cumple ese perfil. Y a la espera de otra gran estrella, quizá Carmelo Anthony, los texanos ganan mucha fuerza en el Oeste.